Por Rachel Gilgoff, MD, FAAP y Devika Bhushan, MD, FAAP
Pasar por una situación estresante (como por ejemplo,
perder a un ser querido, sufrir acoso o incluso sufrir el deterioro producto de pequeños factores estresantes constantes) puede afectar a un niño durante años de maneras a veces inesperadas. La buena noticia es que su hijo puede sanar y crecer a través de estas experiencias estresantes sin efectos a largo plazo en la salud. Y en el proceso de ayudarlos a lograr esto, usted puede entablar una relación más estrecha con él.
Cómo iniciar el proceso de sanación
Luego de una experiencia extremadamente estresante, es posible que los niños sientan que están "destrozados". Pueden sentir que algo anda mal con ellos o que simplemente son "malos". Puede ser útil recordarle a su hijo que:
No hizo nada para merecer que lo que le ocurrió
Está teniendo reacciones normales a una experiencia anormal
La experiencia puede haberlo lastimado, pero la sanación es posible
Herramientas y estrategias de sanación para usted y su hijo:
Relaciones de apoyo
Las relaciones seguras, de apoyo y enriquecedoras pueden marcar la diferencia para un niño que está pasando por una situación estresante. Pruebe estas actividades para entablar relaciones con su hijo:
Siempre que sea posible, tranquilice a su hijo diciéndole que está a salvo. Puede hacer esto con palabras, pero también con abrazos, choques de manos y con apoyos prácticos, tales como una carpa en su habitación o un "rincón acogedor".
Tómese 15 minutos sin teléfonos celulares para seguir su ejemplo en una actividad de su elección.
Compartan actividades, tales como caminar,
cocinar, bailar y
jugar juegos tontos.
Dígale a su hijo lo que
ama de él.
Escuche atentamente lo que dice.
Cree rutinas, tales como leer un
cuento antes de dormir o cenar juntos todas las noches.
Conéctese con amigos, familiares, vecinos y
servicios comunitarios (en inglés).
Busque
un terapeuta u otros apoyos (recursos en inglés):
terapia de arte,
terapia de juego individual,
terapia de interacción entre padres e hijos y
psicoterapia entre padres e hijos.
Calidad del sueño
Las preocupaciones pueden mantenernos despiertos y causar pesadillas o un sueño inquieto y los niños más pequeños pueden comenzar a
mojar la cama nuevamente. Cuando los niños están estresados, es posible que necesiten rutinas más flexibles a la hora de acostarse y más ayuda para conciliar el sueño, como por ejemplo:
Artículos reconfortantes y rutinas de relajación.
Una luz de noche
Aromas relajantes
Juguetes favoritos
Herramientas tradicionales, tales como las muñecas quitapenas guatemaltecas
Una manta con peso (solo si el niño tiene más de
12 meses)
Música
Prácticas de conciencia plena
Lectura
Uso de un diario íntimo
Para aquellos niños que experimentan ansiedad por separación en la noche (lo que es frecuente después de eventos estresantes o traumáticos), considere brindarles la seguridad de que todavía está presente y brindarles recordatorios concretos como:
Notas de amor pegadas al lado de la cama
Prendas de vestir que huelan a usted
Para algunos niños, considere quedarse en su habitación mientras se duermen o incluso dejarlos dormir con usted por un corto período de tiempo mientras procesan la experiencia estresante.
Use la luz a su favor
Durante el día, especialmente temprano, expóngase directamente a la luz natural. Esto ayuda a regular el sueño, el estado de ánimo y la función inmune, entre otros sistemas. De noche, reduzca la exposición a pantallas y luces artificiales atenuándolas. Incluso puede considerar usar
gafas con filtro de luz azul para limitar la exposición a las longitudes de onda lumínicas azules que especialmente despiertan al cerebro.
Nutrición antiinflamatoria y balanceada
El estrés puede aumentar la inflamación en el cuerpo. El estrés también puede llevarnos a comer en exceso o en menor cantidad o a desear alimentos ricos en grasas, sal o azúcar. Saber esto puede ayudarnos a ser amables con nosotros mismos y con nuestros hijos cuando prefieren el brownie y las papas fritas, y también puede guiarnos sobre cómo podemos ayudar.
Facilite el consumo de alimentos saludables, tales como nueces, aguacates, queso y frutas.
Aumente la disponibilidad de verduras (¡frescas o congeladas!) en
bocadillos y comidas.
Evite el jugo y la gaseosa y
beba agua en su lugar.
Reduzca los alimentos que aumentan la inflamación, tales como los alimentos procesados y los carbohidratos blancos (simples).
Actividad física
El ejercicio puede ser una forma eficaz de liberar energía adicional del estrés y contrarrestar su respuesta. Considere:
Hacer saltos de tijera, sentadillas o puentes
Jugar al básquetbol
Bailar una canción favorita
Practicar artes marciales
Practicar yoga
Salir y disfrutar de la naturaleza
El tiempo al
aire libre puede ser relajante, aumentar la resiliencia y ser una fuente de ejercicio.
Conciencia plena
Las prácticas de conciencia plena pueden ayudar a calmar la respuesta al estrés, mejorar las habilidades de autorregulación y aumentar la autocompasión y la empatía:
Apoyo sensorial
Las actividades sensoriales rítmicas y relajantes pueden ayudar a restablecer la forma en que se almacena el estrés en nuestro sistema nervioso y cuerpo. Considere:
Masajes
Música
Movimiento (bailar, caminar, saltar, balancearse, mecerse,
nadar)
Terapia física u ocupacional
Autorregulación y otras habilidades de afrontamiento
Su hijo podrá afrontar mejor el estrés a medida que aprenda a gestionar sus sentimientos y su comportamiento.
Incorpore estructuras y rutinas adicionales. Por ejemplo, esto podría incluir el desarrollo de planes de transición para pasar de una actividad a la siguiente.
Hable y ejemplifique cómo
nombrar y gestionar las emociones fuertes y cuándo buscar ayuda o tomarse un tiempo para alejarse de una situación.
Encontrar un propósito y significado
Esto puede ayudar cuando nos preguntamos "¿Por qué sucedió esto?" "¿Por qué yo?" "¿Por qué sobreviví yo y mi amigo o familiar no?" Incluso los niños pequeños se pueden beneficiar con estas actividades.
Considere:
Una práctica espiritual o conectarse a una comunidad religiosa
Ayudar a los demás a través del trabajo de servicio o voluntario
Encontrar una vocación o un propósito, que incluye ayudar a corregir injusticias sistémicas
Convertirse en un compañero de apoyo
Apoyo emocional y cognitivo
El trauma y el estrés pueden afectar la forma en que pensamos y nos relacionamos con los demás. Es posible que algunos niños necesiten más apoyo a través de:
Trabajar en sus propias respuestas al estrés y ejemplificar las estrategias de sanación
Sabemos que un momento estresante para su hijo también lo es para usted. Está bien que usted no se encuentre bien y todas estas estrategias
y recursos adicionales (en inglés) también pueden ayudarlo.
Comuníquese con el médico de su hijo para obtener más apoyo
Su pediatra puede proporcionarle más recursos. Para algunos niños, los medicamentos pueden ser un tratamiento importante, posiblemente temporal, para abordar ciertos síntomas relacionados con el estrés, en combinación con los pasos anteriores.
Más información
Acerca de la Dra. Gilgoff
Rachel Gilgoff, MD, FAAP es especialista en medicina integrativa, pediatra especialista en abuso infantil, investigadora, escritora científica y madre de dos niños increíbles. Se dedica a mejorar la atención de los problemas de salud relacionados con el estrés y a promover la salud y el bienestar de por vida. |
Acerca de la Dra. Bhushan
Devika Bhushan, MD, FAAP es una pediatra, líder de salud pública, madre e inmigrante indio-estadounidense centrada en la equidad y la resiliencia que se desempeñó como Cirujana General Interina de California en 2022. Dirige una comunidad centrada en la resiliencia y el bienestar en
askdrdevikab.substack.com y
youtube.com/@drdevikab. |