A medida que continúa la pandemia de COVID, los niños con necesidades especiales de atención médica no deberían quedarse atrás en la escuela. De hecho, incluso más niños y adolescentes ahora pueden necesitar apoyo adicional debido a los efectos a largo plazo causados por las infecciones por COVID.
Los niños y jóvenes con necesidades especiales de atención de la salud tienen o corren un mayor riesgo de padecer afecciones crónicas físicas, del desarrollo, conductuales o emocionales, discapacidades y afecciones médicas complejas, y requieren otros servicios de salud diferentes de las de los niños en general.
A medida que las comunidades relajan medidas como el uso de mascarillas para protegerse contra el COVID, es posible que se pregunte cuál es la mejor manera de mantener seguro a su niño o adolescente con necesidades especiales de atención médica en la escuela o en la guardería. Esto es lo que debe saber a medida que las familias y los niños con necesidades especiales de atención médica recuperan el tiempo perdido por retrasos, cancelaciones y cambios en las rutinas diarias y los sistemas de apoyo.
Uso de herramientas de protección y formas flexibles y creativas para satisfacer sus necesidades de manera segura
Cuando el nivel comunitario de COVID es medio o alto, se deben usar más formas de protección, que incluyen:
- Estar al día con las vacunas contra el COVID-19 y dosis de refuerzo. Esto incluye recibir todas las dosis de la serie primaria de la vacuna y una dosis de refuerzo actualizada. Las personas con ciertas condiciones médicas pueden necesitar dosis adicionales. Todas las personas elegibles deben recibir la vacuna y el refuerzo: miembros de la familia, contactos del hogar, trabajadores de la salud y trabajadores de la educación que tienen contacto con niños con necesidades especiales de atención médica.
- Ponerse todas las vacunas recomendadas. Los niños y jóvenes con necesidades especiales de salud también necesitan mantenerse al día con todas las vacunas recomendadas. La vacuna contra la gripe para todos los niños mayores de 6 meses es particularmente importante durante la pandemia para proteger a los niños que tienen un mayor riesgo de complicaciones por la influenza. Es importante reconocer la necesidad de detener la propagación de todas las enfermedades respiratorias.
- Use mascarillas faciales en áreas con niveles comunitarios medios y altos, y en cualquier momento que la propagación es más probable: cuando está en contacto cercano, espacios cerrados, lugares concurridos y cuando las personas no están vacunadas. Las mascarillas ayudan a reducir el riesgo de infección por el virus. Las familias y los cuidadores también pueden considerar el uso de mascarillas. Hay muy pocas condiciones médicas que impidan que los niños mayores de 2 años usen mascarillas. Tenga en cuenta:
La mejor protección la brindan las mascarillas N95/K95/KF94 bien ajustadas, seguidas de las mascarillas quirúrgicas bien ajustadas.
Obtener una buena cobertura de una máscara facial puede requerir atención adicional para un niño o adolescente que tiene una afección craneofacial. Encuentre consejos para ayudar a su hijo a acostumbrarse a usar una máscara facial y cómo lograr que le quede correctamente.
Considere usar este tipo de historietas o hacer un calendario para ayudar a su hijo a usar una máscara. Para los niños que dependen de la lectura de labios, las personas en contacto cercano pueden usar máscaras faciales con ventanas transparentes. Otras formas de comunicarse, como las aplicaciones móviles de voz a texto, también pueden ser útiles. Si su hijo tiene un terapeuta conductual o un terapeuta ocupacional, considere pedirles que hagan que el uso de mascarillas sea parte de los objetivos terapéuticos de su hijo.
Mantenga las manos y superficies limpias. Lávese las manos y mantenga limpias las superficies, los espacios compartidos y los objetos compartidos. Esto ayuda a prevenir todas las enfermedades que se transmiten a través del contacto directo con la superficie. Pregunte si la limpieza de superficies, el lavado de manos y los desinfectantes de manos son parte del proceso escolar y qué suministros estarán disponibles (ya sea de la escuela o traídos por el estudiante).
Considere opciones de telesalud para citas en clínicas y de terapia
Hable con su pediatra y especialistas para planificar qué visitas pueden realizarse de forma virtual y cuáles deben ser presenciales, así como qué cubre su seguro de salud.
Visitas virtuales. Su pediatra, especialistas, terapeutas y otros proveedores que atienden a su hijo pueden ofrecer citas de telesalud por teléfono, Skype, FaceTime u otras opciones de telesalud. Las extracciones de laboratorio y las pruebas de diagnóstico por imágenes domiciliarias también podrían estar disponibles. Hay herramientas disponibles para ayudar a los niños y cuidadores que necesitan asistencia auditiva o visual para participar en las visitas virtuales.
Citas presenciales. Programe la planificación de la atención y las visitas de salud y utilice la telesalud cuando sea necesario. Planifique el momento oportuno de las visitas presenciales, incluidas la vacunación. Por ejemplo, planee hacerlo temprano por la mañana. Garantice opciones de transporte seguro para las citas presenciales, especialmente para aquellas personas que dependen del transporte público. Las adaptaciones creativas, flexibles y receptivas pueden ayudar a satisfacer las necesidades de consultas en persona de su hijo. El personal de atención médica debe cumplir con las solicitudes de las familias para usar una mascarilla facial, incluso cuando no sea obligatorio.
Otorgue prioridad a las indicaciones en persona para los niños con necesidades especiales de salud
Las interrupciones de las clases presenciales afectan el aprendizaje de los niños con necesidades especiales de salud. Las clases presenciales deben ser la prioridad, inclusive y especialmente para los niños con necesidades especiales de salud.
Su pediatra puede ayudar a explicarle de qué manera las escuelas pueden continuar usando múltiples herramientas de protección, controlar las tasas de transmisión comunitaria, utilizar testeos, mascarillas y otro tipo de apoyo para que los niños sigan aprendiendo de forma presencial. También puede hablar con su pediatra acerca de los beneficios y riesgos del aprendizaje presencial y virtual, y las combinaciones de estos.
Incluya estrategias en su Programa de Educación Individualizado (IEP, por sus siglas en inglés) o plan 504. Por ejemplo, se pueden solicitar mascarillas y filtración de aire para proteger a los niños y adolescentes con necesidades especiales de atención médica, incluso si el resto de la escuela tiene estándares relajados.
Se requieren actualizaciones anuales del IEP para los niños que están aprendiendo en formatos virtuales, híbridos y en persona. Los planes y objetivos del IEP pueden y deben ajustarse según sea necesario. Esto incluye cualquier necesidad de educación y servicios compensatorios, incluso si esto ocurre más de una vez al año, especialmente porque muchas evaluaciones y servicios se vieron interrumpidos en los últimos años.
Las familias pueden obtener apoyo sobre temas educativos, incluidos los IEP y los planes 504 aquí:
Recuerde
No todos los niños o adultos reaccionarán de la misma manera al estrés de la pandemia, pero es probable que todas las personas reaccionen de alguna manera. Es importante observar que estas emociones y reacciones probablemente afecten también a los niños con discapacidades cognitivas. Hable con su pediatra acerca de cualquier inquietud, signo o síntoma relacionado con la salud mental.
Las familias, los padres y los cuidadores que se encarguen de niños con necesidades especiales de salud son fuertes y resilientes. Pero para continuar ocupándose de su familia, también debe asegurarse de participar en actividades sobre cuidado personal para tomarse tiempo para usted mismo.