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Edades y Etapas

Nuestra posición con respecto al ácido fólico

​Con el objetivo de reducir la prevalencia de casos de espina bífida, la American Academy of Pediatrics (AAP) apoya la recomendación del Servicio de Salud Pública de los Estados Unidos (US Public Health Service) para que todas las mujeres que puedan quedar embarazadas consuman 400 microgramos al día de ácido fólico (una vitamina B). 

Ayude a prevenir los defectos del tubo neural

El ácido fólico ayuda a prevenir los defectos del tubo neural (DTN), que incluye la espina bífida. Aunque algunos alimentos están fortificados con ácido fólico, no es posible que las mujeres logren la meta de 400 microgramos con su dieta habitual. Por lo tanto, una declaración de la política de la AAP recomienda un suplemento multivitamínico diario que contenga ácido fólico en la dosis recomendada. Los estudios revelan que si todas las mujeres en edad reproductiva cumplen con estos requerimientos dietéticos, 50 por ciento o más de los defectos del tubo neural podrían prevenirse.

Hable con su médico acerca del ácido fólico

Las mujeres que corren un alto riesgo de un embarazo afectado por defectos del tubo neural (por ejemplo debido a un embarazo previo con un defecto del tubo neural, tienen diabetes mellitus o toman medicamentos anticonvulsivos) deben discutir ese riesgo con su médico. Esto incluye los posibles tratamientos con altas dosis de ácido fólico (4.000 microgramos por día), comenzando un mes antes de quedar embarazada y continuando durante el primer trimestre. Sin embargo, como el médico le explicará, las mujeres no deben suministrarse esta dosis tan alta de ácido fólico tomando suplementos multivitamínicos, sino únicamente bajo el cuidado de un médico.

Información adicional: 

Última actualización
11/20/2019
Fuente
Caring for Your Baby and Young Child: Birth to Age 5, 6th Edition (Copyright © 2015 American Academy of Pediatrics)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
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