La Academia recomienda que los médicos coordinen con las clínicas que prestan servicios de atención urgente y las clínicas en comercios minoristas (farmacias) para garantizar servicios de atención médica de alta calidad fuera del entorno del hogar médico.
La American Academy of Pediatrics confirma su posición de que el lugar ideal para que los niños reciban atención médica para tratar problemas de salud graves y no urgentes es en el consultorio del pediatra o cualquier otro establecimiento similar al hogar médico, que ofrezca atención completa y coordinada, de acuerdo con una nueva declaración de política recientemente publicada.
La Academia también reconoce la necesidad de coordinar y ayudar a mejorar las normas de un número creciente de instalaciones para servicios de atención urgente, clínicas en comercios minoristas (farmacias) y servicios de telemedicina comercial que usan las familias debido al beneficio percibido de mejor acceso, conveniencia o costo.
"Los niños merecen recibir atención médica de profesionales capacitados, un médico que conozca sus necesidades y su historial médico, que junto con los miembros de la familia los mantenga a salvo y saludables", dijo Susan Kressly, MD, autora principal de la declaración de política.
"Aunque algunas veces las familias tengan la necesidad de buscar atención médica en clínicas en comercios minoristas o en cualquier otro lugar fuera del consultorio del médico, nos preocupa que el tratamiento que reciben en esas instalaciones no está a la altura de las normas médicas establecidas basadas en evidencia.
El informe, "Cuidados intensivos no urgentes: cuando no se prestan en el hogar médico", a ser publicado en el número de mayo del 2017 de Pediatrics (en línea el 24 de abril), substituye dos políticas publicadas anteriormente que abordan las crecientes y variadas formas de brindar atención médica de urgencia.
Esta declaración actualizada enfatiza que el tratamiento de niños en nuevas prácticas en evolución debe adherirse a los principios fundamentales que están basados en recomendaciones y que incluyen:
- Maximizar el cuidado continúo comunicando con rapidez la información y recomendar al niño un seguimiento necesario dentro del hogar médico.
- Brindar atención que esté basada en la mejor evidencia disponible y fijar limites dentro del marco del servicio que sean claras para las familias.
- Asegurarse que el personal está capacitado y tiene experiencia en cuidado pediátrico.
- Establecer protocolos para la atención en persona y para los servicios posibilitados por la tecnología para hacer la transición del cuidado durante las emergencias, durante situaciones fuera del ámbito de la atención médica y para la cobertura fuera de las horas de atención.
- Establecer estrategias para evaluar continuamente y mejorar la calidad de la atención médica y la seguridad del paciente.
La Academia recomienda que los niños menores de 2 años de edad no sean tratados en clínicas de comercios minoristas o instalaciones para servicios de urgencia que no tengan experiencia pediátrica. La declaración de política exhorta a las prácticas pediátricas para que encuentren formas innovadoras para atender las necesidades de las familias dentro del hogar médico, tales como extender las horas de operación.
El hogar médico continúa siendo el mejor lugar para que los niños y adolescentes reciban atención debido a enfermedades crónicas y afecciones complejas, incluyendo problemas de salud del comportamiento, para visitas rutinarias de control del niño sano, incluyendo exámenes físicos y vacunas; y para el cuidado integral individual, incluyendo los causados por determinantes sociales de la salud.
