Por: Dr. Davil Hill, MD, FAAP
Si hay algo en lo que los niños y los padres están de acuerdo, es en que a nadie le gusta que le digan lo que puede hacer o no hacer. Que no salpique, que no juegue con los alimentos, que no deje de poner fondos en su cuenta de retiro, ¡todo esto simplemente, fastidia! Este es el mensaje que nosotros en la American Academy of Pediatrics hemos escuchado claramente, especialmente en cuanto lo que se refiere a los niños y la tecnología. "No deje ver televisión a su niño. No le dé un iPhone a su bebé". Los padres responden, "Me encantaría hacerlo, pero ahora estoy ocupado poniendo fondos en mi cuenta de retiro. Y rompiendo algunas reglas".
Es por esta razón que nuestras pautas para el consumo de medios se enfocan más en lo que los padres deben promover que en lo que deben evitar. Vea los programas en compañía de sus hijos. Lea sobre las aplicaciones y los juegos que sus niños pueden usar. Tenga una conversación en familia sobre cómo los medios forman parte de sus vidas y cómo darles tiempo a otras actividades.
Si es que existe algo que se deba incluir en esta lista de cosas qué hacer es tomar decisiones conscientes sobre el uso de la tecnología y sus niños. ¿Darle a un niño pequeño un iPhone mientras paga la cuenta en el supermercado atrofiará su desarrollo para siempre? Probablemente no, pero debe estar consciente de que nueva investigación científica reitera que existe una relación entre el consumo mediático de los niños pequeños y los retrasos en el aprendizaje y el habla. Esto no sucede instantáneamente, pero si se da cuenta de que no puede ir al supermercado sin darle el teléfono a la niña, es hora de reconsiderar.
De la misma forma, si usted va a adquirir un nuevo dispositivo para uno de sus niños —ya sea un teléfono inteligente, una tableta o un sistema de video juegos— pregúntese cuál es el objetivo del dispositivo y qué normas quiere establecer sobre su uso. La American Academy of Pediatrics sugiere, por ejemplo, no traer los dispositivos a la mesa del comedor o a la habitación de los niños en la noche. Los niños necesitan de la conversación durante las horas de comida y también necesitan dormir bien durante la noche para funcionar mejor. Una forma fácil de estructurar esta conversación es el uso de la herramienta para el consumo mediático de la familia de la AAP.
Las necesidades de los niños cambian mientras crecen, así como las de la familia. Una computadora portátil que antes se usaba principalmente para el video juego "Minecraft" es ahora una herramienta obligatoria para hacer las tareas escolares. Una red social que se usaba principalmente para subir imágenes divertidas se ha convertido en la herramienta principal para organizar actividades en las noches y para saber lo que alguien le dijo a otro en el transcurso del día escolar.
Por esta razón tómese el tiempo necesario para enterarse de lo que está pasando en línea. Para nuestros hijos, el mundo en línea y el mundo "real" son la misma cosa. Incluso una actividad que parece inútil o de poca trascendencia como un video juego, con frecuencia puede reunir a los niños con sus amigos de la escuela para formar equipos en línea, donde la dinámica del comedor de la escuela y del patio de recreo continúan manifestándose en un mapa estratégico de un servidor específico en algún lugar del desierto.
Así que haga preguntas. Usted debe establecer normas sobre el consumo mediático de su familia de la misma forma como lo hace sobre los alimentos, la seguridad y el sueño. Y de vez en cuando, rompa algunas reglas. Usted es un adulto, ¿quién va a impedírselo?
Nota del editor: Este artículo fue publicado primer en "Keeping Tech in Check", un sitio web de Cricket Media (en inglés) diseñado con el propósito de ofrecer recursos a las familias para mantener un buen equilibro del uso de la tecnología en el hogar.
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Sobre el Dr. Hill:
El pediatra David Hill, MD, FAAP, es el vice presidente de la Clínica Pediátrica Cape Fear en Wilmington, NC y es profesor auxiliar de pediatría en la Facultad de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte. Él ejerce en el Comité Ejecutivo de la Sociedad Pediátrica de Carolina del Norte y en el Consejo de Comunicación y Medios de la American Academy of Pediatrics. El Dr. Hill fue el recipiente del premio Benjamin Franklin de la Asociación de Editores Independientes en el 2013 por su libro "Dad to Dad: Parenting Like A Pro" (De padre a padre: Cómo criar a los hijos como un profesional). También ejerce como consultor sobre temas de la salud infantil en la radio local y nacional, la televisión y los medios de comunicación de la red. Vive en Wilmington, Carolina del Norte con su esposa, tres niños y dos hijastros.