Por: Joel S. Brenner, MD, MPH, FAAP, y Drew Watson, MD, MS, FAAP
¿Su hijo sueña con convertirse en la próxima estrella olímpica o en deportista profesional? Aunque es posible que usted comparta esos objetivos, la American Academy of Pediatrics (AAP) anima a todos los padres y familias a adoptar un enfoque de sentido común cuando se trata del entrenamiento deportivo. Este es el motivo.
Los beneficios del deporte organizado
Hoy en día, es menos frecuente ver a los niños fuera de casa jugando juegos espontáneos o compitiendo entre ellos para ver quién es el más rápido. Parece que el juego abierto y libre es menos popular, ya que los niños eligen un único deporte o actividad y lo practican todo el año.
El deporte organizado puede ser estupendo para los niños. Puede ayudarlos a desarrollar aptitudes físicas y a hacer
ejercicio físico con regularidad, lo que favorece el crecimiento sano y bienestar. Participar en deportes también puede ayudarlos a hacer amigos, aprender a formar parte de un equipo y jugar limpio, mejorar
la autoestima y divertirse.
Pero los estudios demuestran que casi el 70 % de los niños de Estados Unidos abandonan su deporte favorito antes de los 13 años.
Cuando los niños abandonan el deporte
Es una señal de alarma de que demasiados jóvenes están agotados, lo que puede hacer que se alejen de las actividades que antes amaban. El agotamiento también interfiere con el hábito incipiente de la actividad física y los beneficios para la salud física y mental que proporciona a lo largo de toda la vida.
Siga leyendo para obtener más información sobre el agotamiento y cómo mantener la diversión en el deporte.
¿Cómo y por qué se agotan los deportistas jóvenes?
El agotamiento se produce cuando los niños ya no sienten una sensación de diversión y logro cuando juegan o practican. Puede ocurrir con la especialización deportiva (en inglés), es decir, cuando un niño se centra solo en un deporte o una actividad, normalmente durante todo el año.
Concentrarse en una sola actividad exclusivamente (ya sea béisbol, natación, fútbol, danza, gimnasia, hockey, lacrosse o cualquier otra opción) puede hacer que los niños pierdan el interés y el entusiasmo.
Lo que podría sentir su hijo cuando está agotado por el deporte
El sobreentrenamiento y el agotamiento pueden dejar a un joven deportista física o mentalmente exhausto. Podría creer que especializarse (y ganar) en ese deporte es lo que los entrenadores, los padres y las familias quieren y necesitan que haga. En el peor de los casos, los niños podrían asumir que este deporte es su única oportunidad de triunfar en la vida.
¿Cómo puedo fomentar un enfoque saludable hacia el deporte?
Animamos a las familias a adoptar una actitud positiva hacia el deporte que se centre en la diversión, el trabajo en equipo y el ejercicio regular. De este modo, el deporte puede formar parte de un estilo de vida equilibrado que mantenga a los niños activos y sanos hasta la edad adulta.
8 consejos para una práctica deportiva juvenil saludable:
Espere hasta los 6 años, cuando los niños están totalmente preparados, para empezar a practicar deportes organizados. Los niños más pequeños deben disfrutar de juegos libres todos los días para ayudar a que se desarrollen los huesos, los músculos y el equilibrio y darles la oportunidad de ejercitar sus habilidades sociales, todo ello sin la presión de tener que rendir.
Anime a su hijo a practicar distintos deportes. Los estudios demuestran que los niños prosperan cuando prueban muchas actividades diferentes antes de la pubertad. También es menos probable que pierdan el interés o abandonen cuando practican más de un deporte.
Concéntrese en la diversión. ¿Sabía que los niños dicen que la diversión es la razón número 1 por la que quieren hacer deporte? Bríndeles la libertad de elegir actividades que les gusten de verdad. Evite hacer demasiado hincapié en los resultados o el rendimiento, sobre todo en los niños más pequeños.
Establezca límites para el entrenamiento. Una buena norma general es que los niños no entrenen más horas a la semana que las que corresponden a su edad. Los expertos de la AAP aconsejan a los padres y las familias que prevean de 1 a 2 días de descanso a la semana, con al menos 2 o 3 meses libres al año. El tiempo libre puede dividirse en incrementos de 1 mes.
Piense en lo que motiva a su hijo. ¿Piensa en triunfar en la universidad? ¿O en convertirse en un deportista rico y famoso más adelante? Son sueños apasionantes, pero los padres y cuidadores deben presentar una visión equilibrada. Hágale saber a su hijo que solo entre el 3 % y el 11 % de los deportistas de secundaria llegan a competir en la universidad, y solo el 1 % recibe becas deportivas. El porcentaje de deportistas universitarios que se dedican a carreras profesionales es aún menor. Menos del 2 % de los estudiantes deportistas de la Asociación Nacional Atlética (NCAA, por sus siglas en inglés) juegan profesionalmente después de dejar los estudios.
Cuide la salud de su hijo. Los deportistas en edad de crecimiento necesitan dormir mucho y alimentarse bien para recuperarse del estrés que el entrenamiento supone para sus cuerpos. Asegúrese de que su hijo consuma abundantes alimentos ricos en hierro, calcio y vitamina D. Las mujeres deportistas deben estar atentas a los problemas causados por el sobreentrenamiento, como la falta de menstruación. Y dado que muchos deportes hacen hincapié en el valor de mantener un determinado peso o tipo de cuerpo, esté siempre atento a los signos de trastornos alimentarios en su hijo.
Esté atento a las señales de abuso. Si algo le preocupa sobre la relación de su hijo con los entrenadores y otros adultos de un programa deportivo, actúe. Si ve o escucha algo que sugiera abusos, o si su hijo se queja de malos tratos, hable inmediatamente. El médico de su hijo puede ayudarlo a diseñar un plan para defenderlo.
Dé un ejemplo positivo. Si los niños lo ven hacer ejercicio o practicar deporte los 7 días de la semana, incluso cuando se siente cansado o sufre dolores, es posible que intenten hacer lo mismo. Al fin y al cabo, los niños adoptan el ejemplo de sus padres. Si usted practica un cuidado personal saludable, ellos también lo harán.
Su actitud ante el rendimiento deportivo de su hijo también es importante. Busque formas de apreciar todo lo que hace, no solo lo que consigue en la pista, el campo de juego o el gimnasio. Saber que usted lo quiere de manera incondicional fomenta la confianza que necesita para disfrutar al máximo del deporte.
Más información
Acerca del Dr. BrennerJoel S. Brenner, MD, MPH, FAAP, es miembro del Consejo de Medicina Deportiva y Estado Físico y expresidente de la American Academy of Pediatrics. Ejerce la medicina deportiva en Children's Hospital of The King's Daughters y Children's Specialty Group, PLLC en Norfolk, Virginia. Es profesor del Departamento de Pediatría de Eastern Virginia Medical School. Es médico del equipo de una escuela secundaria local y de una escuela secundaria de artes escénicas.
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Acerca del Dr. Watson
Drew Watson, MD, MS, FAAP, es miembro del Consejo de Medicina Deportiva y Estado Físico de la American Academy of Pediatrics. Ejerce la medicina deportiva pediátrica en el Departamento de Ortopedia y Rehabilitación de la Facultad de Medicina y Salud Pública, University of Wisconsin-Madison, y es médico del equipo del Departamento de Atletismo de la universidad.
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