¿Cómo puedo saber si mi hijo adolescente tiene problemas con el juego?
Fíjese en las siguientes señales de alerta:
- Usted encuentra material de juegos de azar como boletos de lotería, hojas de apuestas y fichas de casino entre las cosas de su hijo.
- El chico o la chica ve demasiados programas deportivos y tiene un interés casi obsesivo por el resultado de los campeonatos deportivos
- Va a casinos, a pesar de no tener la edad apropiada.
- Demuestra un interés excesivo por "chequear" Internet o pasa mucho tiempo en Internet
- Tiene deudas inexplicables
- Hace ostentación de grandes cantidades de dinero o compra artículos costosos
- Se ausenta de la escuela, la universidad o el trabajo
- Presenta ansiedad y nerviosismo
- Roba para gastar en los juegos de azar
Cualquier tipo de juego, sea de suerte o de destreza, en el que se apueste dinero es considerado un juego de azar. La mayoría de los juegos de azar son ilegales para menores de 18 años. Sin embargo, los adolescentes encuentran su propio modo de participar en juegos de azar, como por ejemplo:
- Jugar a las cartas o a los dados por dinero
- Participar en juegos de destreza por dinero (por ejemplo, al billar o al baloncesto)
- Comprar boletos de lotería y tarjetas de la suerte (que se raspan para comprobar las ganancias)
- Jugar juegos tipo casino (como máquinas tragamonedas o tarjetas de juego)
- Hacer apuestas en eventos deportivos
- Participar en juegos de azar por Internet
Qué pueden hacer los padres
Usted es el mejor modelo para sus hijos. Examine su propia actitud y sus hábitos. ¿Se gasta hasta el último dólar en boletos de lotería? ¿Va con frecuencia al casino con la esperanza de volverse rico? Aunque usted no esté haciendo nada incorrecto, podría estar enviando un mensaje a su hijo adolescente de que los juegos de azar son una actividad sana e inofensiva.
Hable con sus hijos sobre los juegos de azar. Recuérdeles que ésta es una actividad ilegal para los adolescentes. Exprese claramente su opinión acerca de los juegos de azar y hágale saber a sus hijos lo que usted espera de ellos. Ayúdelos a desarrollar modos de resistirse a los juegos de azar y a adquirir otros intereses y actividades. No lleve a sus hijos al casino aun cuando el establecimiento ofrezca cuidado de niños.
El identificar a tiempo una adicción a los juegos de azar es la clave para que el tratamiento sea efectivo. Si percibe que su hijo adolescente tiene este tipo de problema, hay personas en su comunidad que le pueden ayudar, tales como pediatras, consejeros, maestros, personas de edad y miembros del clero.
El juego compulsivo es como cualquier otra adicción. La ayuda externa podría ser el único modo de que una persona rompa con la adicción. Hable con el pediatra sobre las opciones de tratamiento, como consejería individual o terapia familiar, que le pueden dar al jugador compulsivo la fuerza necesaria para dejar el hábito.