La American Academy of Pediatrics (AAP) analiza en un nuevo informe clínico el uso de alimentos basados en organismos genéticamente modificados (OGM) y su efecto en la salud de los niños. En el informe, la AAP insta a realizar más investigación y ofrecer más transparencia en el etiquetado para ayudar a las familias a tomar decisiones informadas al comprar alimentos.
Los productos basados en OGM se encuentran ampliamente en el suministro de alimentos, pero provienen de una lista limitada de cultivos. En Estados Unidos se utilizan principalmente para hacer que los cultivos sean resistentes a los herbicidas químicos. Como resultado, los herbicidas se utilizan cada vez más en los cultivos y se encuentran cada vez más en los productos alimenticios, con investigaciones limitadas sobre los impactos a largo plazo en la salud de los niños.
Las investigaciones muestran que los nuevos genes introducidos en los cultivos OGM no representan riesgos únicos para la salud humana, según el informe clínico "
Use of Genetically Modified Organism (GMO)-Containing Food Products in Children" (en inglés). Sin embargo, la AAP afirma que se necesita una evaluación para examinar los posibles riesgos para la salud de los herbicidas utilizados en la producción de alimentos OGM.
El herbicida común glifosato, por ejemplo, a menudo se rocía sobre cultivos como el maíz y la soja que están genéticamente modificados para resistirlo. A veces quedan restos del herbicida en los alimentos.
Ayudar a las familias a explorar las opciones alimenticias
"Un viaje al supermercado puede ser complicado hoy en día, ya que los padres sortean barreras de tiempo y costos, preocupaciones sobre alergias alimentarias y preguntas sobre los alimentos orgánicos y los posibles efectos sobre la salud de la modificación genética de los alimentos", dijo Steven A. Abrams, MD, FAAP. El Dr. Abrams es el autor principal del informe clínico, escrito por el Comité de Nutrición y el Consejo de Salud Ambiental y Cambio Climático.
"Los pediatras pueden ayudar a responder preguntas, especialmente porque se espera que las nuevas regulaciones para el etiquetado aumenten la confusión", dijo el Dr. Abrams.
La mayoría de los productos estadounidenses derivados de cultivos OGM se encuentran en alimentos ultraprocesados y piensos para animales. Aunque la tecnología de OGM se puede utilizar para aumentar el contenido de micronutrientes de los alimentos, actualmente hay poco uso de estas técnicas para aumentar el valor nutricional de los alimentos en los Estados Unidos.
"Un patrón equilibrado para los niños enfatiza los alimentos vegetales y minimiza los ultraprocesados", afirmó Jaclyn Lewis Albin, MD, FAAP, coautora del informe.
La Dra. Albin dice que las buenas opciones incluyen frutas y verduras, frutos secos y semillas, legumbres (incluidas las lentejas, los frijoles y los guisantes), hierbas y especias, fuentes de grasas saludables y cereales integrales.
"La mayoría de estos alimentos en su estado integral y mínimamente procesados no son OGM por naturaleza", dijo la Dra. Albin.
Recomendaciones de la AAP:
Tenga en cuenta las diferencias entre el etiquetado orgánico, el de productos libres de OGM y el de bioingeniería. El etiquetado orgánico (que también garantiza el estatus de productos libres de OGM) y los nuevos estándares y procesos de etiquetado de bioingeniería están regulados por el Departamento de Agricultura
(Department of Agriculture) de los EE. UU. El etiquetado de productos libres de OGM sigue siendo voluntario y normalmente lo gestionan organizaciones de terceros. La presencia de una etiqueta que señala que el producto no contiene OGM no indica que las versiones no etiquetadas del alimento necesariamente contienen productos OGM.
Concéntrese en un patrón dietético compuesto principalmente de alimentos integrales de origen vegetal y, al mismo tiempo, minimice los alimentos ultraprocesados.
Las familias que quieran evitar por completo los productos OGM pueden comprar productos orgánicos o aquellos etiquetados como libres de OGM según pruebas de terceros. Los agricultores orgánicos no tienen permitido el uso de semillas OGM, alimentos para animales OGM, ingredientes OGM o pesticidas convencionales, antibióticos en animales de granja, lodos de aguas residuales ni irradiación.
Los pediatras pueden minimizar los mensajes basados en el miedo y apoyar a las familias mediante la toma de decisiones compartida. El aumento del costo de algunos alimentos libres de OGM, especialmente si también son orgánicos, podría limitar esta elección para muchas familias. Es importante que los cuidadores, incluidos los pediatras, reconozcan las limitaciones que impone la economía. Pueden enfatizar los beneficios de muchos alimentos asequibles y mínimamente procesados que no están diseñados mediante bioingeniería.
Las escuelas y hospitales dedicados al cuidado de niños podrían considerar evitar el uso de alimentos OGM para minimizar la exposición al glifosato cuando haya alternativas disponibles y asequibles.
Otras oportunidades de investigación sólidas incluyen los posibles efectos a largo plazo sobre la salud de los alimentos que contienen OGM, incluida la carcinogénesis, así como los beneficios potenciales de la modulación nutricional de los alimentos que utilizan tecnología de OGM.
"La AAP insta a la transparencia de la información sobre los productos alimenticios para ayudar a las familias a tomar decisiones informadas", dijo la Dra. Albin.
"Un pediatra puede ayudar a eliminar cualquier confusión y apoyar a las familias con orientación práctica sobre lo que se debería incluir en el carrito del supermercado. Me resulta más fácil centrarme en lo que debemos ofrecer como alimento para los niños en lugar de en lo que debemos evitar, y hay muchas opciones nutritivas".
Los informes clínicos creados por la AAP están escritos por expertos médicos, reflejan la evidencia más reciente en el campo y pasan por varias rondas de revisión de pares antes de ser aprobados por la Junta Directiva de la AAP y publicados en
Pediatrics.
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