La enfermedad de Kawasaki no es común y se presume que es infecciosa. Los primeros casos se observaron en Japón a finales de 1960. La enfermedad recibe ese nombre por un médico japonés que describió la enfermedad por primera vez. Aunque aún es poco común, los médicos están particularmente preocupados con respecto a la enfermedad de Kawasaki debido a que se ha convertido en la principal causa de una arteriopatía coronaria en niños. De hecho, si no se reconoce y se trata adecuadamente, puede ocasionar inflamación e irregularidades en las arterias coronarias.
En la mayoría de casos, la enfermedad de Kawasaki afecta a los jóvenes entre las edades de 1 y 8 años, con la mayor cantidad de casos en niños entre los 18 y 24 meses de edad. Aproximadamente el 80% de niños que desarrollan la enfermedad de Kawasaki son menores de 5 años. La mayoría de casos ocurren durante los meses de inverno y primavera.
La causa de la enfermedad de Kawasaki es desconocida, y no está claro cómo se propaga la enfermedad. La transmisión de persona a persona aún no se ha descubierto. Sus diversas características clínicas sugieren que es una enfermedad infecciosa.
Señales y síntomas
La primera señal de la enfermedad de Kawasaki es una fiebre alta, con una temperatura generalmente arriba de 102.2 °F (39 °C) que dura al menos 5 días. Además, deben existir 4 de las siguientes 5 señales y síntomas para realizar el diagnóstico de la enfermedad de Kawasaki:
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Irritación y enrojecimiento de los ojos (inyección de la conjuntiva) sin secreción ocular
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Inflamación y enrojecimiento de la boca, lengua, labios y garganta
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Salpullido
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Enrojecimiento e inflamación de las palmas de las manos y plantas de los pies con descamación posterior de la piel alrededor de las uñas (la descamación ocurre en la segunda semana de la enfermedad)
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Ganglios inflamados en el cuello, siendo uno mayor de 0.5 pulgadas de diámetro. Entre otras características algunas veces asociadas con la enfermedad de Kawasaki están la irritabilidad, dolor de estómago, diarrea y vómitos.
Las señales y síntomas de la enfermedad de Kawasaki pueden ser menos específicas en los bebés menores de 12 meses, dificultando la elaboración de un diagnóstico preciso. El diagnóstico de la enfermedad de Kawasaki se puede considerar en este grupo de edad incluso cuando no existen todos los síntomas.
Cuándo llamar a su pediatra
Es importante suministrar un tratamiento a tiempo para la enfermedad de Kawasaki. Si su hijo tiene varios de estos síntomas, particularmente una fiebre que dura más de 5 días, comuníquese con su pediatra.
¿Cómo se realiza el diagnóstico?
No hay disponible ninguna prueba de diagnóstico para la enfermedad de Kawasaki. Su pediatra realizará el diagnóstico con base en las señales y síntomas de su hijo y al descartar enfermedades que tengan algunos de los mismos síntomas, como sarampión, infecciones estreptocócicas, síndrome de shock tóxico, artritis reumatoide juvenil y ciertas reacciones a los medicamentos. El médico puede solicitar pruebas de sangre que pueden descartar otras enfermedades infecciosas. También es posible que su pediatra realice una ecocardiografía, un ultrasonido del corazón, para monitorear las arterias coronarias.
Tratamiento
Si la enfermedad de Kawasaki se diagnostica en su hijo, su médico puede recomendar una hospitalización para recibir los medicamentos para reducir la inflamación. En la mayoría de casos, este tratamiento incluirá inmunoglobulina intravenosa (anticuerpos purificados de sangre humana), suministrados junto con aspirina. A pesar de que por lo general se les recomienda a los padres evitar administrarles aspirina a los niños debido a puede poner en riesgo a los jóvenes de padecer del síndrome Reye, los médicos están de acuerdo con que los beneficios superan los riesgos de la enfermedad de Kawasaki. Además, el uso de aspirina generalmente se recomienda para estos jóvenes. Sin embargo, nunca debe administrarle a su hijo aspirina para ninguna condición sin consultar primero con su pediatra.
¿Cuál es el pronóstico?
Con el tratamiento adecuado, la mayoría de niños se recuperan completamente de la enfermedad de Kawasaki en unas cuantas semanas. Sin embargo, si no se administra ningún tratamiento, aproximadamente el 20% desarrollará irregularidades en las arterias coronarias, incluyendo aneurismas (el agrandamiento o abultamiento de los vasos sanguíneos). Incluso con el tratamiento adecuado, algunos niños aún pueden desarrollar alguna enfermedad cardíaca. Los niños con mayores riesgos son hombres jóvenes y tienen señales de una intervención cardíaca al principio de la enfermedad.
Prevención
No existe ninguna medida preventiva conocida contra la enfermedad de Kawasaki en este momento.