Omitir los comandos de cinta
Saltar al contenido principal
 
Problemas de salud

Parálisis cerebral

​​Por: JoJo Yang, MD y Courtney J. Wusthoff MD, MS, FAAP

Los niños con parálisis cerebral tienen dificultad para controlar su movimiento. Esto se debe a una lesión cerebral o un desarrollo anormal del cerebro a una edad temprana o antes del nacimiento. La parálisis cerebral, la discapacidad más común que afecta el control motor, puede afectar de diversas maneras a los niños.

¿Cómo afecta la parálisis cerebral a los niños?

La parálisis cerebral puede afectar a los niños de muchas maneras diferentes. Algunos niños que tienen parálisis cerebral leve aprenden a caminar y correr, pero lo hacen un poco más tarde que otros niños. Otros niños con parálisis cerebral pueden aprender a caminar con la ayuda de dispositivos, como un caminador o dispositivos ortopédicos para piernas. Igualmente, otros pueden usar una silla de ruedas. A algunos niños, la parálisis cerebral les dificulta alimentarse o hablar, porque es difícil controlar los movimientos necesarios para hacer esas actividades.

El tipo de parálisis cerebral que tiene un niño puede estar relacionado con las partes del cerebro que recibieron lesiones a una edad temprana. Si a su hijo le diagnostican parálisis cerebral, es importante que comparta el diagnóstico con los médicos, terapeutas y personal escolar para ayudar a que su hijo reciba los tratamientos y apoyos que lo ayudarán.

Mientras que la parálisis cerebral afecta el control motor, esto es diferente de la inteligencia u otras funciones cerebrales. Un niño puede ser muy inteligente, a pesar de que la parálisis cerebral le dificulte el control de algunos movimientos.

¿Cuáles son algunos signos de parálisis cerebral en niños?

El primer indicio de que un niño podría tener parálisis cerebral es generalmente un retraso motor, por ejemplo, aprender tarde a sentarse o caminar. Si un niño tiene un riesgo conocido de parálisis cerebral debido a una lesión cerebral anterior, suelen planificarse controles especiales del desarrollo para detectar signos tempranos de la afección. En otros casos, las familias o los pediatras pueden ser los primeros en notar el retraso motor en un niño. Si tiene alguna inquietud acerca del desarrollo de su hijo, hable con su pediatra.

La parálisis cerebral puede aparecer de diferentes maneras:

  • La espasticidad es el aumento del tono muscular. Esto significa tensión anormal de los músculos de un niño. La tensión se puede sentir con determinados estiramientos. La tensión está presente incluso cuando los músculos están relajados. La espasticidad puede hacer que los brazos se mantengan rígidos y cerca del cuerpo, o puede hacer que las piernas se endurezcan, con dificultad para flexionarlas.

  • La hipotonía es el tono muscular bajo. Esta puede aparecer como flacidez muscular. Los niños con hipotonía pueden tener problemas para sentarse o sostener la cabeza.

  • La diplejia es la dificultad para controlar las piernas. En algunos casos, esto puede dificultar el caminar.

  • La hemiplejia es la dificultad para mover un lado del cuerpo. Los niños con parálisis cerebral hemipléjica pueden tener dificultad para usar el brazo y la pierna del lado izquierdo o derecho.

  • La distonía hace que los músculos se contraigan de manera no controlada. Esto puede producir espasmos musculares o movimientos involuntarios.

¿Qué causa la parálisis cerebral?

Hay tres motivos diferentes por los cuales un niño puede desarrollar parálisis cerebral, a saber:

  • Parto prematuro. Esta es la causa más común de parálisis cerebral en los Estados Unidos.

  • Problemas médicos durante el embarazo o cerca del nacimiento.

  • Enfermedades o lesiones de recién nacido o lactante, por ejemplo, ictericia muy grave, accidentes cerebrovasculares o infecciones cerebrales.

Para los niños con parálisis cerebral, puede recomendarse una MRI (resonancia magnética) para ver si hay lesión cerebral presente. En otras ocasiones, pueden ser útiles las pruebas genéticas. Su pediatra puede trabajar con un especialista, como un pediatra especializado en desarrollo o un neurólogo pediátrico, para ayudar a las familias a planificar estas pruebas.

¿Cómo se trata la parálisis cerebral?

La parálisis cerebral es un problema médico crónico, a largo plazo. No hay cura que pueda hacerla desaparecer por completo, pero hay maneras de ayudar a un niño con parálisis cerebral a estar lo mejor posible. La fisioterapia y la terapia ocupacional, los medicamentos y los dispositivos de ayuda, como dispositivos ortopédicos, pueden ayudar a un niño a alcanzar el máximo de su potencial. El tratamiento brinda apoyo al cerebro, ayuda al desarrollo y previene las complicaciones.

  • Intervención temprana. Los programas de intervención temprana pueden ayudar a los bebés con atrasos del desarrollo. Un equipo puede incluir especialistas en conducta, fisioterapeutas, enfermeros y trabajadores sociales. El equipo enseña a la familia ejercicios y le da consejos para ayudar a que el bebé aprenda habilidades nuevas.

  • Fisioterapia. Los fisioterapeutas son especialistas que trabajan con los niños en ejercicios de estiramiento y fortalecimiento. Ayudan a aprender movimientos nuevos, como rodar, sentarse o caminar.

  • Terapia ocupacional. Estos especialistas ayudan a los niños a realizar tareas cotidianas. Usan una combinación de ejercicios y buscan soluciones alternativas para sobrellevar las dificultades.

  • Terapia del lenguaje. Los terapeutas del habla pueden ayudar a los niños a aprender a hablar y comunicarse de otras maneras.

  • Dispositivos de ayuda. Diferentes tipos de equipos pueden ayudar a los niños con parálisis cerebral. Los dispositivos ortopédicos para piernas pueden sostener sus piernas cuando aprenden a caminar. Los dispositivos ortopédicos para brazos pueden sostener los brazos o las manos en una posición normal. Otros tipos de dispositivos de ayuda incluyen teclados de comunicación, sillas de ruedas especiales y sillas para ayudar a sentarse.

  • Medicamentos. Los medicamentos pueden ayudar cuando las terapias no son suficientes. Estos pueden incluir medicamentos para ayudar con la espasticidad muscular o inyecciones para relajar determinados músculos. Esto puede ayudar a un niño a participar en las terapias.

Cómo mantener la salud de los niños con parálisis cerebral

Su pediatra y su equipo de atención también lo ayudaran a mantener sano a su hijo controlando cualquier problema médico que, en ocasiones, puede acompañar la parálisis cerebral. La atención continua también puede ayudar a evitar complicaciones.

  • Problemas asociados con la parálisis cerebral. Cada niño es diferente. Para algunos niños con parálisis cerebral, puede ser necesario realizar controles adicionales para detectar problemas que pueden presentarse en conjunto con la parálisis cerebral. Estos pueden incluir problemas de aprendizaje, convulsiones/epilepsia, dificultades de la vista y pérdida de la audición. Su pediatra lo ayudará a crear un plan para su hijo.

  • Evitar complicaciones articulares y óseas. Los niños que no se mueven mucho, especialmente aquellos que pasan mucho tiempo en la misma posición, pueden desarrollar “contracturas". Esto sucede cuando las articulaciones se traban en una posición. El estiramiento puede ayudar a prevenir esta complicación. Los niños que no se paran o no caminan también tienen riesgo de presentar baja densidad ósea (osteopenia) y escoliosis (curvatura excesiva en la columna). Su pediatra y los demás miembros de la atención ayudarán a estar atentos a los problemas tempranos y a crear planes para evitar o tratar estas complicaciones.

​​Acerca de la Dra. Yang

Qian-Zhou (JoJo) Yang, MD es una especialista en epilepsia pediátrica y profesora adjunta de Neurología en la University of North Carolina, Chapel Hill. Se especializa en la atención de niños con epilepsia compleja y en incorporar enfoques de medicina integradora a​​ los problemas neurológicos frecuentes. Integra el Departamento de Neurología de la AAP.

Acerca de la Dra. Wusthoff

Courtney J. Wusthoff, MD, MS, FAAP es una neuróloga pediátrica que trabaja en Stanford Children's Health. Es profesora adjunta de Neurología y pediatría en la Facultad de Medicina (medicina neonatal) de la Stanford School of Medicine. Su trabajo se centra en la atención de bebés con afecciones neurológicas. Integra el Departamento de Neurología de la AAP y ha tenido la oportunidad de ser oradora en los eventos de CME de la AAP.​


Última actualización
4/16/2021
Fuente
American Academy of Pediatrics Section on Neurology (Copyright © 2021)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
Síganos