A medida que cría a su hijo adoptivo, él es suyo en
todo el sentido de la palabra. Sin embargo, al mismo tiempo hay un
aspecto para la vida de su hijo y es el hecho de que tiene padres
biológicos en algún lugar, que podría crear la necesidad de que usted tenga que "compartir" a su hijo con su pasado.
Adopciones abiertas
La mayoría de adopciones de niños mayores y muchas adopciones de bebés, son "abiertas" y los padres adoptivos han conocido o incluso conocen a los padres biológicos, quienes podrían vivir cerca. A veces, algunos familiares biológicos tienen contacto continuo con los niños.
Cuando empiezan las preguntas
Durante la mitad de la infancia su hijo probablemente tendrá preguntas, fantasías y sentimientos acerca de sus padres biológicos. La mayoría de familias adoptivas pueden lidiar bien con estos asuntos. En este período de tiempo, los niños tienden a sentir más conflicto psicológico y emocional sobre ser adoptados. Algunas veces puede que prueben y reten a sus padres adoptivos con declaraciones como "Mis verdaderos padres no harían..." Pero los padres adoptivos a menudo se sienten ansiosos si su hijo dice esto. Durante los años de edad escolar, los niños a veces dicen cosas como esas al calor de una discusión, para manipular a sus padres o para tratar de salirse con la suya. No entre en pánico cuando enfrente estos retos, estos son una parte normal de la adaptación y aceptación de su hijo a sus circunstancias familiares únicas. Los hijos no adoptivos también prueban a sus padres con declaraciones similares.
La búsqueda
Durante la adolescencia y la edad adulta, su hijo se puede interesar en saber más sobre sus padres biológicos e incluso puede considerar buscarlos. Esto puede ser una función de curiosidad o es posible que quiera obtener un sentido de plenitud sobre su propia identidad.
Hay vías disponibles para llevar a cabo esta búsqueda, por lo general a través de:
- Grupos de apoyo
- Intermediarios confidenciales ordenados por el estado
- La agencia de adopción
- Un abogado
Aunque usted puede sentirse amenazado por el deseo de su hijo de saber más acerca de sus propios padres biológicos o incluso conocerlos, recuerde que su interés es normal y apropiado para la etapa de desarrollo. Todos queremos saber de dónde venimos y cuáles son nuestras raíces. La mayoría de niños y adultos jóvenes adoptados entienden que ellos en realidad no pertenecen a sus padres biológicos.