¿Con quién hablas cuando necesitas obtener consejos sobre tu salud y vida personal?
Aunque lo ideal es hablar con tus padres (o tutores), es posible que no sean tu primera opción.
Si te da mucha vergüenza o te preocupa cómo reaccionarán tus padres, es importante que hables con un adulto que pueda darte asesoramiento de confianza, como tu médico.
Tu médico:
Respeta tu privacidad
Ha respondido todo tipo de preguntas de otros adolescentes
Es un experto en salud y bienestar, por lo que querrá hacerte preguntas privadas para ayudarte a tomar decisiones saludables
Puede ayudarte a encontrar una manera de hablar con tus padres u otros adultos de confianza en tu vida
A continuación, se presentan algunas preguntas que los adolescentes han hecho sobre la privacidad y sus preocupaciones de salud:
Preguntas comunes que podrías tener sobre la privacidad
¿Cómo puedo hablar con mi médico en privado?
Simplemente pídelo. Tu médico puede reservar tiempo para hablar en privado durante casi todas las visitas.
¿Sobre qué puedo hablar con mi médico?
Puedes y debes hablar con tu médico (o la enfermera del consultorio) sobre CUALQUIER COSA y de TODO.
A veces, tu médico te hará preguntas sobre la
escuela, tus amigos y familiares. A veces te preguntará cosas personales, como, por ejemplo, sobre cómo te sientes o qué te gusta hacer en tu tiempo libre.
Cuanto más sepa tu médico sobre ti, mejor podrá responder tus preguntas o preocupaciones.
¿Mi médico les contará a mis padres lo que hemos hablado?
El médico mantendrá la privacidad o confidencialidad de los detalles de lo que hablen. La única ocasión en la que tu médico no puede respetar la privacidad es cuando cree que hay una amenaza inmediata para tu seguridad o la de alguien más. Pregúntale directamente a tu pediatra al respecto para que puedas comprender completamente.
También puedes hablar con tu médico sobre cómo compartir información necesaria para mantener la seguridad de todos.
En tu próxima visita, asegúrate de lo siguiente:
Pregunta a tu médico qué cosas pueden ser confidenciales en el lugar donde vives.
Dile a tu médico si algunas de las cosas de las que hablan se pueden compartir con tus padres.
Pregúntale a tu médico quién tiene acceso a tus registros médicos (en papel y electrónicos) y si tus registros están seguros.
Habla de tus inquietudes sobre la privacidad si te comunicas con tu médico por correo electrónico, a través del portal del paciente o por teléfono.
Si voy al médico solo, ¿no se enterarán mis padres cuando reciban la factura?
Deberías preguntarle a tu médico, ya que depende del tipo de seguro que tenga tu familia.
Pregúntale a tu médico qué medidas se toman para proteger tu información cuando los registros deben compartirse con compañías de seguros y otros profesionales de la salud fuera del consultorio del médico.
Preguntas sobre sexo y sexualidad
¿Por qué necesito decirle a mi médico si estoy teniendo relaciones sexuales?
Es útil que tu médico sepa que tienes
sexo, o que planeas tenerlo, para que pueda ayudarte a tomar decisiones seguras y saludables que sean las mejores para ti.
Tu médico puede asegurarse de que tengas información confiable sobre preservativos y otros
métodos anticonceptivos para prevenir el embarazo y las infecciones de transmisión sexual (ITS), también llamadas enfermedades de transmisión sexual (ETS), como el
virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Si tienes una infección, puede ayudarte a ti y a tu pareja a recibir tratamiento. Tu pediatra también puede explicarte cómo reconocer y establecer relaciones positivas, seguras y sanas.
¿Puedo hacerme la prueba de detección de una ITS sin que lo sepan mis padres?
En la mayoría de los casos, puedes hacerte la prueba y recibir tratamiento para las ITS sin que tus padres lo sepan. A veces, sin embargo, depende de la edad y otros factores. Habla con tu médico para obtener más información y saber cómo recibir este tipo de atención.
¿Puedo obtener la píldora (u otros tipos de anticonceptivos) por mi cuenta?
En muchos estados, puedes obtener servicios de planificación familiar, incluidos anticonceptivos y anticoncepción de emergencia, sin permiso de tus padres. Si sientes que no puedes hablar con tu médico, hay clínicas públicas como las clínicas de ITS (a veces llamadas clínicas de planificación familiar), en muchas comunidades.
En estas clínicas, los adolescentes pueden hacerse pruebas de ITS y obtener anticonceptivos por su cuenta. Las clínicas de salud escolares también podrían ofrecer servicios de planificación familiar sin el permiso de los padres. Habla con tu médico para asegurarte de que esto sea así donde vives.
¿Mi médico les contará a mis padres si soy homosexual, lesbiana o bisexual?
Tu médico no compartirá esta información con tus padres a menos que existan preocupaciones serias sobre tu seguridad, como, por ejemplo, si te sintieras tan triste que estuvieras pensando en hacerte daño.
Incluso en ese caso, tu médico le informaría a tus padres que estás deprimido y que necesitas ayuda, pero no revelaría tu
orientación sexual. Tu médico podría ayudarte a decidir si quieres contarlo a otras personas y cómo hacerlo.
¿Y si me obligaron a mantener relaciones sexuales?
Los
abusos sexuales son muy traumáticos. Si te ves obligado a tener relaciones sexuales por cualquier persona, incluso alguien con quien estés en una relación o alguien que conozcas, mereces atención y apoyo que sean seguros y se centren en tus necesidades y comodidad.
Puedes recibir toda la atención relacionada con este tema de manera confidencial. Concretamente, tienes derecho a que se recolecten pruebas y a llamar a la policía para presentar cargos.
También tienes derecho a recibir o rechazar pruebas y tratamiento de ITS, incluida la anticoncepción de emergencia (la "píldora del día después") para prevenir el embarazo, y asesoramiento en caso de crisis por violación.
Recuerda que tu médico está disponible para ayudarte a superar este difícil acontecimiento.
Preguntas acerca del alcohol y las drogas
¿Debo someterme a una prueba de drogas si mi escuela o mis padres me lo piden?
Puedes negarte a someterte a un análisis de
drogas, pero lo mejor es que hables con tu médico de los motivos por los que te lo piden y de cómo el hecho de negarte o aceptarlo podría afectar lo que suceda.
Tengo un problema de consumo de alcohol (o drogas) y quiero dejarlo antes de que mis padres se enteren. ¿Dónde puedo recibir ayuda?
Aunque lo mejor es hablar honestamente con tus padres, puedes hablar con tu pediatra sobre el tema sin el consentimiento de tus padres. Tu médico puede ayudarte a encontrar un asesor o un programa. En la mayoría de los casos, los padres pueden sentirse decepcionados por el consumo de alcohol o drogas, pero cuando su hijo adolescente ha pedido ayuda, la mayoría se sienten aliviados y apoyan el tratamiento.
Tu médico también puede ayudarte a decirle a tus padres. Es importante que ellos sean parte de tu tratamiento.
Otras preguntas
¿Qué pasa si no tengo padres que cuiden de mí o estoy en un hogar de acogida?
En general, los sistemas de acogida protegen la confidencialidad, pero hay diferentes programas y diferentes normas. Pide a tu médico más información al respecto.
¿Cómo les digo a mis padres que estoy reprobando algunas asignaturas en la escuela?
Tu médico puede ayudarte a idear un plan para que, ya sea por tu cuenta o junto con el médico, puedas decirles a tus padres. Es probable que se enteren de la noticia por la
escuela, por lo que es mejor que la escuchen primero de ti.
Si no es posible hablar con tus padres sobre esto, habla con otro adulto de confianza, como un asesor escolar, un familiar, un amigo o adultos solidarios en tu comunidad. Hay ayuda a tu disposición.
A veces no puedo dejar de sentirme triste o preocupado y pienso en hacerme daño. ¿Quién puede ayudarme?
Si estás pensando en lastimarte o tu vida está en peligro, tu médico tendrá que informar a tus padres. Tu médico también podría derivarte para una evaluación de emergencia para mantenerte a salvo.
Dile a tu médico o asesor escolar si te sientes preocupado, muy molesto o
deprimido. Hay muchas maneras para ayudarte a que te sientas mejor. Tu médico o asesor podrá ayudarte a encontrar el tratamiento adecuado para ti.
Cinco formas de tomar el control de tu salud
Sé honesto. Cuanto más puedas compartir con tu médico, mejor podrá ayudarte. Esto incluye indicarle si sigues dietas especiales, recibes medicamentos o tienes problemas de salud.
Haz preguntas. Es importante que entiendas la información y los consejos sanitarios que recibes, y que puedas confiar en la fuente. A veces, los términos médicos pueden ser confusos, así que no tengas miedo de hacer preguntas. Ninguna pregunta es tonta.
Habla con tus padres. Si es posible, intenta hablar con tus padres. Tu médico podría sugerirte qué puedes decir. Mantente en contacto con tu médico.
Visita a tu médico una vez al año, no solo cuando estés enfermo. Asegúrate de que tu médico tenga tu dirección y número de teléfono actuales. Conserva también la información de contacto de tu médico.
Sé responsable. Busca ayuda y asesoramiento cuando lo necesites. No faltes a tus citas, reprograma las visitas cuando sea necesario y haz un seguimiento con tu médico cuando tengas preguntas.
Un mensaje importante para los padres
Ahora que su hijo es adolescente, su cuerpo y sus sentimientos están cambiando. Es importante mantener una relación estrecha con su hijo adolescente, pero esto también significa fomentar su capacidad de tomar decisiones saludables y permitirle
hablar a solas con el médico en cada visita. Esto le ayudará a conocerse a sí mismo, a desarrollar una relación de confianza y a tomar decisiones saludables.
El médico animará a su hijo adolescente a compartir información con usted. Sin embargo, podría haber cosas de las que prefiera hablar primero con el médico, y eso está bien. Lo más importante es que su hijo hable de sus problemas de salud con un adulto responsable.
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