Podrá haber notado que tendemos a referirnos a los proveedores de atención médica de bebés como pediatras por una cuestión de practicidad, y la American Academy of Pediatrics (AAP) considera que quienes ofrecen una atención médica pediátrica óptima son los pediatras. Sin embargo, hay profesionales de la salud que no son médicos, pero que también son miembros importantes del equipo de atención médica pediátrica y que también cuidan a los niños y bebés.
M.D. y D.O. Si los médicos tienen un "M.D." después de su nombre, eso simplemente informa que asistieron a una facultad de medicina "tradicional". Otros tienen las iniciales "D.O." después de sus nombres, una designación que le dice que se graduaron de una facultad de medicina osteopática. Las facultades de medicina tradicional y osteopática forman médicos, y ambos tipos de médicos pueden hacer residencias pediátricas y especializarse en la atención de niños. Si bien hay algunas diferencias entre estos 2 tipos de médicos, ambos tienen la formación necesaria para tratar a las pacientes con afecciones de salud o enfermedades.
Pediatra certificado por la junta. Los pediatras certificados por la junta son médicos graduados de la universidad, que cursaron 4 años de facultad de medicina y tienen al menos 3 años de capacitación práctica (residencia) en pediatría. Para obtener la certificación de la junta, los pediatras deben además aprobar un estricto examen preparado por la Junta Americana de Pediatría (American Board of Pediatrics, ABP). Para conservar la certificación de la junta, los pediatras deben recibir formación permanente en pediatría, demostrar que brindan atención de calidad al paciente y tener una licencia médica válida. Estos requisitos de certificación ayudan a garantizar que los pediatras certificados (incluyendo a los especialistas) tengan los conocimientos y las habilidades suficientes para brindar atención de calidad a los niños de todas las edades.
Médico de familia. Los médicos de familia pueden ser doctores en medicina o en osteopatía y, al igual que los pediatras, también completan su formación en la facultad de medicina y al menos 3 años de capacitación práctica (haciendo una residencia en medicina familiar). Al igual que los pediatras, los médicos de familia deben aprobar un examen y cumplir con varios requisitos a fin de obtener la certificación de la junta y, posteriormente, renovar su certificación. No obstante, a diferencia de los pediatras, los médicos de familia no se limitan a atender a niños desde el nacimiento hasta la adolescencia. Tal como indican sus títulos, atienden a pacientes de todas las edades.
Profesional de enfermería. En ciertos casos, se encontrará con que su bebé tiene programada una consulta con un enfermero o enfermera profesional pediátrico o de familia. Estos proveedores de atención médica son enfermeros licenciados con educación adicional. Los que se especializan en pediatría, por lo general, reciben capacitación avanzada en el cuidado de niños. Los enfermeros profesionales tal vez trabajen en el consultorio de su médico, como parte de un equipo dirigido por este profesional.
A quien sea que elija, cerciórese de que tenga la capacitación o la experiencia para ofrecer orientación sobre las cuestiones relacionadas con la salud y las enfermedad es a las que se pueda enfrentar, muchas de las cuales son exclusivas de la infancia.