No obstante, algunos bebés se ajustan a la rutina de sueño del recién nacido que tanto temen muchos padres y que se conoce como reversión diurna-nocturna. Como lo implica la descripción, se sabe que algunas veces los recién nacidos mezclan sus días y noches. Estos bebés que temporalmente tienen alterado el horario de sueño, comienzan a aumentar la cantidad de tiempo que duermen cada vez que van a dormir según lo planeado, pero simplemente lo hacen más durante el día, mientras exigen alimentación, cambio de pañal y entretenimiento durante la noche. Tan dolorosamente agotador como pueda ser este enfoque revertido para todos aquellos que estamos acostumbrados a dormir durante la noche, la seguridad de que esto también pasará viene de nuevo a nuestra mente. No podemos más que garantizarle que no está lejos de lograrlo. En la mayoría de los casos, el hecho de que el recién nacido aprende a reemplazar muchas pequeñas siestas cortas por períodos más largos de sueño, ya sea durante el día o la noche, es un buen augurio para una rutina más “civilizada” de sueño en el futuro no muy lejano.
Luces encendidas, luces apagadas
Si su bebé parece decidido a “jugar” durante la noche y dormir durante el día, no hay una solución rápida, pero sí hay algunas cosas fáciles que puede hacer desde el principio para establecer un escenario de hábitos de sueño más aceptable en el futuro. Durante sus primeras semanas en casa con el bebé, trate de establecer una atmósfera que diferencie claramente el día de la noche. Dormir bien durante la noche no es algo que sucede de un día para otro, pero este enfoque puede ayudarle a lograrlo más rápidamente.
Permita el sueño activo.Durante el día, no se preocupe si su bebé duerme en las áreas más "activas" de la casa; es decir, en ambientes con luces encendidas o música, por ejemplo. Del mismo modo, no tenga miedo de realizar una diligencia diurna ocasional, incluso si esto significa que el recién nacido no logra permanecer despierto durante todo el camino y se duerme antes de regresar a casa.
Contraste consistente. No pase mucho tiempo preocupándose acerca de los ruidos de fondo como conversaciones, teléfonos o música durante el día. Por el contrario, trate de que sus interacciones durante la noche sean tranquilas y silenciosas.
Mantenga el enfoque.Siempre que sea posible, adopte un enfoque más centrado en sus interacciones durante la noche, limitándolas a alimentarle, sacarle el aire y arrullarle cuando sea necesario.
Enfoque de hablar en voz baja.Adquiera el hábito de adoptar las medidas arriba mencionadas en una habitación oscura y hable en voz baja cada vez que desee indicar a su recién nacido que es un buen momento para dormir.