Por Courtney J. Wusthoff, MD, MS, FAAP
Las primeras semanas y los primeros meses de la vida de un bebé son períodos de un desarrollo sorprendente. Las nuevas habilidades y los nuevos movimientos surgen rápidamente. Estos indicadores del desarrollo suelen llamarse "desarrollo motor"; son una fuente de deleite para los bebés y para sus familias.
Aquí presentamos un panorama general de algunos indicadores del desarrollo motor típicos que cabe esperar desde el nacimiento hasta los 3 meses:
Primer mes
Su bebé no podrá controlar muchos de sus movimientos durante las primeras semanas. A medida que comience a desarrollar más habilidades físicas, sus movimientos podrían seguir siendo espasmódicos o temblorosos. Pero está aprendiendo muy rápido, ¡espere!
Sus ojos sobre usted. ¿Sabía usted que una de las primeras partes del cuerpo que un bebé puede mover son los ojos? Al principio, los recién nacidos solo ven a un pie de distancia (30,48 cm) pero eso es suficiente para que muevan los ojos para mirar los rostros que tienen cerca. Además, su bebé puede dirigir la mirada hacia sonidos y voces familiares.
Control del cuello. Los recién nacidos pueden mover la cabeza hacia un lado. Podrá ver esto la primera vez que lo alimente, cuando el reflejo de búsqueda lo incita a girar la cabeza hacia el pezón. Pero durante las primeras semanas, los bebés no tienen buen control del cuello. Su bebé necesita su ayuda para sostener la cabeza.
Reflejos del recién nacido. Además del de búsqueda, es probable que su bebé muestre otros movimientos reflejos durante estas primeras semanas. Para ver el reflejo de marcha automática en acción, sujete bien a su bebé por debajo de los brazos (sosteniéndole también la cabeza) dejando que sus pies toquen una superficie plana: pondrá un pie delante del otro haciendo un movimiento que parece que estuviera caminando. Este reflejo desaparece después de unos pocos meses y la mayoría de los bebés no dan sus primeros pasos "verdaderos" hasta que tienen alrededor de un año de edad.
Segundo mes
El sistema nervioso de su bebé ya ha madurado un poco. Algunos de los reflejos del recién nacido comienzan a dar lugar a movimientos voluntarios. Con un mejor control muscular, el movimiento se torna más fluido y activo. Esto es lo nuevo que puede esperar:
Levanta la cabeza cuando está acostado boca abajo. La mayoría de los bebés de esta edad pueden levantar la cabeza cuando están acostados boca abajo. Poner al bebé periódicamente un rato boca abajo es una buena forma para que fortalezca el cuello y el tronco. Algunos llorarán cuando los pongan boca abajo, pero en general la cosa mejora tras varios intentos. Sirve que haya algo interesante frente a ellos, como la cara de mamá, para que sirva de estímulo para levantar la cabeza. Si bien es demasiado pequeño para gatear, es posible que su bebé intente o empiece a levantarse desde la posición horizontal.
La mano en la boca. Durante estas semanas es posible que su bebé empiece a agitar los brazos cuando está emocionado. Sus manos le llamarán la atención cada vez más. Puede que pase mucho rato intentando moverlas frente a su cara, donde pueda verlas. Después de muchos intentos, es probable que pueda llevárselas a la boca. El movimiento de los dedos todavía es limitado, por lo que probablemente las manos todavía estén cerradas formando puñitos apretados. Chupárselas podría convertirse en una forma de calmarse.
Tensión de los labios. Tal vez ya haya notado los movimientos faciales aleatorios, que incluyen sonrisas por reflejo, mientras su bebé duerme. Pero a partir de algún momento cerca de la sexta semana de vida, puede que su bebé le muestre su primera sonrisa real en un gesto genuino de afecto o diversión.
Tercer mes
Los movimientos de brazos y piernas del bebé se vuelven cada vez más fluidos. El reflejo de "sobresalto" probablemente ya haya desaparecido. Se está volviendo más fuerte y capaz de coordinar sus movimientos.
Logra estirarse. Es probable que observe que todo el cuerpo de su bebé se ve más relajado. Ya no tendrá las manos cerradas en puños todo el tiempo. De hecho, se entretendrá abriéndolas y cerrándolas con cuidado. También disfrutará de patalear más activamente, estirando las piernas y modificando su posición enrollada de recién nacido.
Listo para darse vuelta. A medida que el pataleo cobra más fuerza, pronto podrá impulsarse para pasar de estar boca abajo a estar boca arriba. Si bien la mayoría de los bebés todavía no pueden darse vuelta a esta edad, algunos sí lo logran. Tenga cuidado de no dejar a su bebé solo sobre algún mueble de donde puedan caerse al voltearse por sí solo.
Listo para agarrar. Los bebés de esta edad comienzan a intentar agarrar (coger) cosas que están a la vista, pero fuera de su alcance. Mientras que el reflejo del recién nacido hace que los bebés cierren los dedos alrededor de cosas que tocan la palma de su mano, ahora el agarre de su bebé podría ser más deliberado. Incluso puede que sostenga y agite juguetes de mano.
Listo para rebotar o saltar. Cuando lo cargan y lo sostienen en posición "de pie" sobre una superficie, como puede ser su regazo, el bebé descubrirá lo lindo que es rebotar. Esta es una forma divertida de jugar juntos a medida que el bebé empieza a apoyar algo de peso en sus piernas. Es mejor no dejar a los bebés en asientos saltarines o arneses para saltar. En realidad, estos elementos retardan la evolución del movimiento de su bebé porque no le permiten practicar tanto el uso de los músculos.
Cuándo ver al pediatra
Recuerde que los movimientos de cada bebé serán algo diferentes. Si su bebé no domina los movimientos exactamente al mismo ritmo que otros bebés, por lo general esto no indica ningún retraso en el desarrollo ni otro problema.
Es buena idea hablar con el pediatra si observa que su bebé hace algo de lo siguiente:
Deja de hacer algo que solía hacer. Todos los bebés tienen días buenos y días malos. Tal vez pasen algunos días sin volver a repetir una nueva destreza. Pero si el desarrollo de su bebé está retrocediendo o se detiene sistemáticamente, hable con el pediatra.
No está usando una parte o un lado del cuerpo. Por lo general, los bebés de esta edad no demuestran ser zurdos ni diestros. Si su bebé usa solo una mano o un lado del cuerpo, hable con el pediatra.
Parece demasiado flácido. Los bebés pequeños pueden parecer "flácidos" hasta que desarrollan un poco de control muscular. Pero si su bebé se ve particularmente blando o decaído, podría significar que está enfermo o tiene una infección.
Tiembla o se sacude demasiado. A muchos recién nacidos les tiemblan las manos o la barbilla, pero si les tiembla todo el cuerpo, eso podría estar indicando un problema médico. Llame al pediatra.
Más información:
Sobre la Dra. Wusthoff
Courtney Wusthoff, MD, FAAP, es profesora adjunta de Neurología en la Universidad de Stanford y directora de Neurología de la UCI Neurológica Neonatal del Lucile del Hospital Infantil Packard. Se especializa en la atención neurológica de recién nacidos y bebés y de niños con epilepsia. Dentro de la American Academy of Pediatrics, integra la Sección de Neurología.