En gran parte de la historia humana, las madres han amamantado con éxito a sus bebés sin la ayuda de almohadas de lactancia, almohadillas de lactancia o hasta mecedoras. Nuestros cuerpos y los cuerpos de nuestros hijos están bien diseñados para hacer que la lactancia materna sea un proceso simple y gratificante. Algunos artículos pueden hacer que la vida de una madre que está amamantando sea mucho más fácil, si se ajustan a su presupuesto. (Los equipos para la lactancia materna también son maravillosos regalos para el bebé).
Sostenes de lactancia
Un sostén para lactancia bien diseñado que soporte de manera cómoda sus senos agrandados puede ser muy útil. Es difícil predecir qué tamaño de sostén de lactancia necesitará, pero puede hacerse una idea y comprar por lo menos uno o dos mientras está embarazada para llevarlos al hospital. Después del nacimiento de su bebé puede tallarse uno, el cual nunca debe estar ajustado ni le debe apretar.
Los sostenes de lactancia tienen solapas frontales que se pueden separar con una mano (mientras con la otra sostiene al bebé) y dejarla abierta para amamantar. La ropa exterior diseñada para amamantar proporciona aberturas para que el bebé tenga acceso a su seno y es una idea práctica para las mamás a quienes les preocupa amamantar de manera discreta en público.
Tanto la ropa como los sostenes de lactancia están disponibles en las tiendas de maternidad, en los catálogos de ropa para madres y niños y en muchas tiendas por departamentos. Por supuesto, las playeras que se puede levantar con facilidad y las blusas que se pueden desabotonar desde arriba también pueden funcionar bastante bien.
Almohadillas de lactancia
Las almohadillas de lactancia desechables o lavables, que se pueden colocar dentro de la copa del sostén para que absorban cualquier leche que pueda gotear entre las tomas, son útiles para las mujeres cuyos senos gotean mucho o para quienes algunas veces se encuentren lejos de sus bebés en una hora regular en la que debe alimentarlo. Evite las almohadillas con forro de plástico que impide el flujo de aire alrededor de los pezones y que mantienen la humedad, lo que puede irritarlos. Las almohadillas de lactancia se pueden comprar en la mayoría de farmacias y supermercados, aunque una pieza doblada de tela absorbente funciona casi igual de bien.
Controlador de posiciones y otros equipos
Aunque no es necesario para una lactancia materna exitosa, el equipo para ayudarle a sostener, arrullar y calmar a su bebé puede ser un elemento adicional para amamantar. Algunas mamás consideran que una almohada de lactancia hecha a la medida, diseñada para ayudar a posicionar a su bebé adecuadamente y sostenerlo para una toma completa sin que se le cansen los brazos, es más fácil que tratar de arreglar unas almohadas o almohadones ordinarios. (Las almohadas de lactancia vienen en varias formas y tamaños, por lo que se le recomienda que pruebe varias antes de elegir una que sea adecuada para usted).
Un taburete eleva el nivel de su regazo, lo que hace que su bebé esté más cerca de su seno. También puede ayudarle a mantener su espalda recta, lo que puede hacerla sentir más cómoda. Algunas nuevas mamás disfrutan de una silla mecedora o reclinable para utilizarla en la habitación del bebé en anticipación a esos momentos preciosos cuando una sesión de lactancia materna se combina con una siesta.
Otras piezas de equipo opcional incluyen una cangurera para bebés o portabebés que libera sus manos mientras mantiene a su bebé lo suficientemente cerca para amamantarlo y un moisés para que su bebé duerma al lado de su cama. Puede encontrar estos artículos en la mayoría de tiendas de suministros para bebés y catálogos de equipo para bebés.
Sin embargo, recuerde que el equipo especial y el mobiliario son adicionales. Todos lo que verdaderamente necesita para amamantar con éxito son sus senos y un bebé con hambre.