Usted está guardando sus cosas en la oficina y apagando el ordenador cuando suena el teléfono. Es su jefe, le dice que se quede unas horas más. Su empresa lleva la delantera para ganar a un cliente importante y se espera que usted se quede y ayude a cerrar el trato. Luego, su hijo de 12 años llama: Se cortó el dedo y no está seguro de qué hacer.
Lo bueno es que ustedes dos han conversado sobre esto anteriormente. Usted averigua más sobre la herida, no es grave y no es necesario llevarlo al departamento de emergencias. De manera que amablemente le recuerda cómo cuidar una cortada con los suministros que encuentre en el botiquín de primeros auxilios, que se encuentra junto al lavamanos.
Es una buena idea tener un plan para cuando los niños estén solos en casa, dice el Dr. Robert Sege, FAAP, director de Pediatría Ambulatoria en Boston Medical Center. Sin considerar la edad, el plan idealmente debe incluir a un adulto que esté más cerca de casa cuando mamá o papá no lo estén.
Muchos padres creen que hacer que sus niños llamen a sus teléfonos celulares es un plan a prueba de fallas, dice Sege. Pero cuando están al otro lado de la ciudad, no están disponibles o cuando la llamada se desconecta, sus niños necesitan a una persona que pueda llegar a donde ellos están rápidamente. Es posible que necesiten a alguien que pueda ayudarlos físicamente, dice.
“En la puerta del refrigerador tenemos los nombres y números telefónicos de los vecinos más cercanos y lo más seguro es que la mayor parte del tiempo uno de ellos va a estar en casa”, dice el Dr. Sege. “A los vecinos no les molesta e hicimos lo mismo por ellos. Y hemos cuidado a sus hijos en nuestra casa cuando no tenían llaves para entrar a la suya. Se toman una taza de chocolate mientras alguien busca una llave”.
¿Cuándo está bien que se queden “solos en casa”?
La mayoría de estados no tienen leyes acerca de las edades en que los niños pueden quedarse solos en casa. “Depende de la edad y madurez de su niño”, dice el Dr. Sege, que también es miembro del Comité de Prevención de Lesiones, Violencia y Envenenamiento de la American Academy of Pediatrics. Él dice que la mayoría de niños que están en cuarto o quinto grado ya están listos para quedarse en casa por períodos breves; sin embargo, exhorta a los padres a asegurarse de que sus hijos no sientan miedo de estar solos en casa.
Antes de que los niños se queden solos, lo mejor es hacer un ejercicio de práctica. Muéstreles e indíqueles qué deben esperar y hacer si el teléfono suena o hay un apagón. Déjelos que le expliquen qué harían. Asegúrese de que saben cómo usar el teléfono (teléfono fijo y celular), como apagar el sistema de alarma y dónde guarda sus linternas.
Asegúrese de que sepan su nombre y dirección (¡y cuándo pueden darla y cuándo no!). Cuando ambos se sientan cómodos, comiencen con períodos breves de quedarse solo en casa, vaya a la tienda de abarrotes o al banco, por ejemplo, y gradualmente prolongue el tiempo. Ellos también deben saber qué hacer en caso de emergencia, dice el Dr. Sege.
Reglas básicas
Su hijo debe llamarlo cuando llegue a casa. Una llamada diaria para reportarse, dice el Dr. Sege, proporciona al padre y al hijo la posibilidad de hablar por 2 a 3 minutos sobre “cómo estuvo su día”. También puede enviarle un correo electrónico o un mensaje de texto. Esto también establece una rutina y ayuda a dar un poco de tranquilidad a padre e hijo.
A medida que los niños crecen, se vuelve aún más importante establecer reglas sobre lo que es aceptable, como invitar a otros niños y cuántos pueden visitarlos. Esto es vital cuando los hijos se convierten en adolescentes. “El tiempo después de la escuela es realmente el más difícil, es entonces cuando ocurre la mayoría de problemas, entre las 3 y las 6 p. m.”, dice el Dr. Sege.
Establezca límites para ver la televisión. “Lo que veo en mi práctica que no me agrada es que los niños van a la escuela, regresan a casa, ven la TV y esperan a que sus padres regresen a casa. En realidad no tienen tiempo para jugar con otros niños”, dice el Dr. Sege.
Organice tiempo para los niños, dice el médico. “La forma de desarrollar destrezas sociales y maneras de relacionarse con las personas es haciéndolo y si usted piensa sobre la vida de un niño en la escuela... creo que esto es universal, los maestros no quieren que los niños hablen en clase, tienen 20 minutos para almorzar y para el receso, de manera que ¿cómo hacen todas las cosas que realmente los ayudan a crecer?”
¿Es adecuado para su hijo?
El Dr. Sege dice que los padres deben preguntarse qué hace su hijo después de la escuela y si estar solo en casa es la mejor opción. “Ciertamente es más fácil y muchos padres se sienten muy cómodos si su niño está solo en casa pero para el niño... puede estar teniendo otras experiencias”.
Busque programas después de la escuela que imparta la escuela, la asociación YMCA local, los niños exploradores o la federación de arte o guarderías que ofrecen programas de llevar y recoger a los niños de escuela primaria. “Intente pensar de forma poco convencional sobre lo que disfruta su niño”, dice.
Los deportes también pueden ser una opción. Los deportes proporcionan la oportunidad de hacer amigos y pertenecer a un grupo o aprender una destreza, dice el Dr. Sege.
Consejos para los padres
Números de emergencia
Coloque los nombres y números de tres vecinos y familiares que vivan cerca
Coloque el número de su trabajo y de su celular (incluso si su niño lo sabe de memoria, si están lesionados o tienen un ataque de pánico, pueden olvidarlo)
Coloque números de emergencia como 9-1-1
Primeros auxilios
Vendajes
Crema antiséptica
Llamadas telefónicas
Escriba un guion para vendedores por teléfono u otras personas que llaman, como “Mi mamá no está disponible, ¿puedo anotar el mensaje?”
Recuerde a los niños que no deben decir que usted no está en casa.
911
- Asegúrese de que sus niños sepan cuándo llamar al 9-1-1.
Sistemas de alarma
- Enséñeles cómo encenderlos y apagarlos.
Cocinar
- Enséñeles, hágalo con ellos, luego déjelos cocinar mientras los observa.