Por: Claire McCarthy, MD, FAAP y Scott Needle, MD, FAAP
A nadie le gusta pensar en los desastres que afectan a nuestras comunidades. Pero ya sean huracanes, incendios forestales, tornados u otros desastres, justamente lo que tenemos que hacer es pensar en ellos. La preparación hace a la diferencia y, literalmente, puede salvar vidas.
Los niños y las familias pueden prepararse juntos. Los desastres pueden dar miedo, ¡pero estar preparado es una forma de tener menos miedo!
10 formas de preparar a su familia para los desastres
Aquí hay simples e importantes cosas que puede hacer con su familia para estar preparados:
- Hable con sus niños sobre los desastres naturales que pueden suceder, y sobre lo que ellos deben hacer.
Sepa adónde puede recurrir para obtener noticias e información fiable sobre el estado del tiempo y los desastres naturales. Planifique diferentes formas de recibir alertas, como por medio de mensajes de texto, por ejemplo.
Enseñe a los niños estrategias básicas para casos de incendio, tales como mantenerse cerca al suelo para evitar el humo o tocar los pomos de las puertas para ver si están calientes antes de abrir las puertas. Tenga un plan de escape en caso de incendio.
Si usted vive en una zona afectada por huracanes, tornados, terremotos o incendios forestales, hable con los niños sobre cómo reconocer sus señales y a dónde deben dirigirse.
Cerciórese de que sus niños saben cómo marcar el 911 (o el teléfono de emergencia de su país). Incluso niños muy pequeños pueden aprender a hacerlo.
Elija a una persona (preferiblemente que no viva en la misma zona y que pueda verse afectada por el mismo desastre natural) que todos puedan contactar en caso de quedar separados.
Identifique un lugar fuera de la casa donde se puedan reunir que no sea la casa donde viven para que puedan encontrarse en caso de ser separados y no poder contactarse.
¡Practique! Esta es la mejor manera de asegurarse de que han memorizado la información. Hagan simulacros en caso de incendios y de cualquier otro desastre natural que pueda ocurrir en la zona donde vive. Si tiene niños pequeños, trate de hacerlo como un juego para que no se sientan tan atemorizados y estarán más dispuestos a practicar con regularidad.
Planee el lugar a donde iría si tiene que evacuar. Si tiene mascotas, cerciórese de que las aceptan en ese lugar.
Si piensa comprar un generador de emergencia en caso de cortes de energía, cerciórese de saber como utilizarlo y evitar envenenamiento por monóxido de carbono.
Prepare un kit familiar para desastres naturales
Tener
provisiones básicas es crucial en caso de un desastre, pero en la tensión del momento, puede que no tenga tiempo o presencia de ánimo para reunirlas. Así pues, que debe hacerlo con antelación.
La American Academy of Pediatrics y los
Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades tienen mucha información sobre las provisiones que debe empacar, pero aquí le brindamos algunas ideas para empezar:
Un kit de primeros auxilios.
Agua (2 galones por día por persona).
Linternas, baterías (pilas), cargadores.
Un radio que funcione con pilas
Alimentos no perecederos, como los alimentos enlatados/en conservas (incluyendo un abrelatas) y barras de granola o mantequilla de maní.
Tazas (vasos) y utensilios (tenga a mano un kit para campamento que son de bajo costo).
Cambio de ropa, y una manta o dos.
Juguetes o juegos.
Suministros para las mascotas.
Medicamentos, si puede, trate de tener surtidos suficientes para el futuro y mantenga algunos en el
kit de desastres. A lo sumo, tome una foto del envase/empaque del medicamento para que tenga la información del producto que necesita tomar
Consejo: No siempre es posible almacenar medicamentos vigentes, así que haga una lista de todo lo que debe tener listo para tener al alcance con prontitud. Puede adherir esta lista a la parte superior del contenedor (kit), que debe ser de un tamaño razonable (puede que necesite un par de estos) y en un lugar de fácil acceso.
Sus niños deben participar en la planificación y empaque, haga esta actividad a manera del juego "busca un tesoro". Recuerde revisar las fechas de caducidad y recuérdeles a los niños que deben revisarlas también. Entre más lo haga como algo normal y cotidiano, mejor.
Con suerte, sus preparaciones para casos de emergencia no serán nunca más que un juego. Pero si ocurriera un desastre, podría ser el juego más importante que su familia haya jugado (practicado).
Información adicional:
Sobre la Dra. McCarthy:
La doctora Claire McCarthy, MD, FAAP es pediatra de medicina primaria en el Hospital Infantil de Boston, profesora auxiliar de atención pediátrica en la Universidad de Medicina de Harvard, editora veterana de las Publicaciones de Salud de Harvard, y portavoz oficial de la American Academy of Pediatrics. La doctora escribe sobre la salud y la crianza para el
Harvard Health Blog, el
Huffington
Post y muchas otras publicaciones en línea e impresas.
Sobre el Dr. Needle
Scott Needle, MD, FAAP es pediatra de atención primaria y director médico de los Centros de Salud Elica en Sacramento, California. Se ha desempeñado como presidente del Comité Federal de Asesoramiento para los Niños en Caso de Desastres, y en la actualidad es miembro del comité ejecutivo del Consejo de Niños y Desastres de la AAP. El Dr. Needle ha producido varios materiales educativos de la AAP, así como diversas presentaciones. El Dr. Needle es el autor principal de la política de la AAP titulada, Ensuring the Health of Children in Disasters (Cómo garantizar la salud de los niños en los desastres naturales) - en inglés.