La American Academy of Pediatrics (AAP) ofrece en un informe clínico recién publicado, orientación sobre el análisis y la promoción de la salud sexual para niños y adolescentes con discapacidades.
El informe tiulado "Promoción de una sexualidad saludable para niños y adolescentes con discapacidades", publicado en la revita Pediatric de julio de 2021, actualiza un informe de 2006 y reconoce la necesidad de que los pediatras ayuden a las familias a comenzar a analizar la sexualidad de manera temprana en la vida del paciente.
Entendiendo los cambios y promoviendo la seguridad
"Es muy importante ayudar a todos los niños y jóvenes, incluidos aquellos con discapacidades, a obtener una comprensión saludable y precisa de sus cuerpos y sentimientos cambiantes", dijo Amy Joy Houtrow, MD, PhD, MPH, FAIP, autora líder del informe, desarrollado por el Consejo de la AAP sobre niños con discapacidades.
"La investigación nos dice que muchos niños aprenden sobre la sexualidad a través de los medios de comunicación y no de un miembro de la familia o un médico de confianza", dijo la Dra. Houtrow. "Los pediatras ofrecemos una orientación que promueve la autonomía de los niños y los jóvenes con discapacidades al mismo tiempo que ayuda a reducir su riesgo de violencia sexual, abuso, explotación y coerción".
El informe establece que los pediatras están en la mejor posición de promover prácticas y educación más seguras sobre cómo lograr una sexualidad saludable, independientemente de las limitaciones físicas, cognitivas o socioemocionales. El informe insta a los pediatras a examinar sus propias creencias y actitudes sobre la discapacidad y la sexualidad para garantizar que su propio asesoramiento refleje la inclusión y la voluntad de proporcionar orientación temprana, resolución de problemas y derivaciones si fuera necesario.
La AAP también recomienda:
Se alienta a los proveedores de asistencia médica pediátrica a analizar los comportamientos apropiados "privados" contra los "públicos" desde una edad temprana, como la preescolar.
Cuando un niño llega a los 8 o 9 años, los pediatras deben comenzar a analizar la pubertad y es posible que tengan que hacerlo antes si el niño está en riesgo por una pubertad precoz. Esto es especialmente importante para los niños que están descubriendo su identidad de género no binario u orientación sexual no heterosexual.
Se alienta a los pediatras a formar equipo con las familias que pueden sentirse incómodas abordando la salud sexual. Pueden hacerlo a través de un proceso compartido de toma de decisiones que responda a su cultura, y eleve los derechos de los niños con discapacidades para obtener conocimiento y comprensión con respecto a su sexualidad en desarrollo.
Los pediatras son ideales para aconsejar a los jóvenes con discapacidades sobre la prevención de enfermedades de transmisión sexual y el embarazo no deseado, así como sobre los beneficios de la vacunación contra el HPV. Ellos pueden ayudar a los adolescentes a obtener anticoncepción confidencialmente con adhesión a normas de consentimiento informado.
Los pediatras pueden formar equipo con las escuelas para garantizar que los niños con discapacidades tengan acceso a educación sexual apropiada para su desarrollo. Esto debe incluir información sobre victimización sexual, prácticas sexuales seguras, consentimiento y respeto.
"La sexualidad es un reflejo del deseo humano natural de un sentimiento de conexión e intimidad", dijo la Dra. Houtrow. "El pediatra es un gran recurso para ayudar a las familias con preguntas que puedan tener sobre sus hijos con discapacidades a medida que estos crecen y se convierten en adultos jóvenes", finalizó.