Roséola, también conocida como súbito o sexta enfermedad, es una infección común viral contagiosa ocasionada por el virus herpes humano 6 (HHV). Esta cadena de virus herpes es diferente al que ocasiona las infecciones de herpes genitales o fuego.
La Roséola ocurre con mayor frecuencia en niños de 6 a 24 meses. Los más pequeños generalmente tienen fiebres altas (mayores a los 103 °F o 39.5 °C) durante 3 a 7 días. Después de que desaparecen las fiebres, se desarrollará un salpullido en el torso y se diseminará a los brazos, piernas, espalda y cara. Este salpullido únicamente dura unas horas, pero en algunos casos persiste durante varios días. Algunos niños tienen convulsiones asociadas con las fiebres altas, pero con más frecuencia se acompaña por una disminución en el apetito, una tos leve y moqueo. Este patrón de una fiebre alta seguido por un salpullido le ayudará a su pediatra a hacer el diagnóstico de esta infección. Sin embargo, HHV-6 también puede ocasionar fiebres sin salpullido o salpullido sin fiebres.
El virus herpes humano 6 se disemina de persona a persona por medio de las secreciones del tracto respiratorio. Puede reducir las oportunidades de que su hijo se infecte al asegurarse que se lave sus manos cuidadosamente y con frecuencia. No hay un tratamiento específico para la roséola, generalmente desaparece sin ocasionar ninguna complicación. Si la fiebre de su hijo lo hace sentir incómodo, pregunte a su pediatra si puede bajarle la temperatura con acetaminofén.
Los síntomas similares están asociados con otra infección por virus herpes ocasionada por HHV-7. Muchos niños infectados con HHV-7 solamente tienen una enfermedad leve. El virus herpes humano 7 puede ser responsable del segundo o los casos recurrentes de roséola que originalmente ocasionaron el HHV-6. Como con todos los virus en la familia del herpes, estos virus permanecerán dentro del cuerpo de por vida. Si un sistema inmune de una persona se debilita por enfermedades o medicamentos, el virus puede volver a aparecer y ocasionar fiebre e infección en los pulmones o el cerebro.