Ser madre o padre soltero puede ser uno de los mayores desafíos de la vida. Aparentemente de la noche a la mañana, hombres y mujeres se ven en una situación en la que deben asumir las responsabilidades de criar solos a los hijos. Aunque en algunas formas estas nuevas circunstancias pueden ser una experiencia igual de satisfactoria que compartir la crianza con una pareja, existen problemas que son únicos de los padres solteros.
Más de un cuarto de todos los niños en Estados Unidos viven con solo uno de los padres. La mayoría de situaciones de madres o padres solteros son resultado del divorcio, pero algunos niños en edad escolar han experimentado la muerte de uno de los padres. Otros posiblemente han sido adoptados por una persona soltera. Los niños hijos de una madre que nunca se casó correspondían al 36 por ciento de todos los niños de las familias de un solo padre en 1995.
Aunque ser madre o padre soltero puede ser un cambio dramático de la vida que una vez tuvo o imaginó, puede ser una situación familiar realizable y gratificante. Particularmente cuando ocurre como resultado de un divorcio, puede ser una circunstancia más deseable que el matrimonio desastroso que le precedió. Muchos padres solteros describen la satisfacción que sienten al haber dejado atrás la tensión y disensión de su matrimonio y por forjar una nueva vida para ellos y sus hijos.
La mayoría de madres solteras trabaja. Si no trabajan antes del divorcio, muchas ingresan al mundo laboral durante el período posterior al divorcio. Aunque buscar trabajo y encontrar uno que mantenga a la familia puede ser estresante, la mayoría de mamás solteras indica que disfrutan de la autonomía relacionada con llevar a casa su cheque de pago. En muchos casos también disfrutan de una gran satisfacción por sus trabajos.
Y como los niños ven que sus madres son exitosas en el lugar de trabajo, suelen desarrollar más respeto hacia ellas. Los hijos de madres trabajadoras usualmente también tienen una visión más amplia de lo que las mujeres pueden lograr en la vida; no es de sorprenderse entonces, que las niñas que crecieron en hogares solo con su madre tienden a ver un rango mayor de oportunidades ocupacionales para ellas posteriormente en la vida.
Aunque el horario de trabajo de una madre soltera puede reducir la cantidad de tiempo que pasa con sus hijos, esas horas juntos tienden a volverse mucho más valiosas para todos. Los padres solteros suelen desarrollar relaciones más cercanas con sus hijos que los padres de familias más tradicionales con dos padres. También hay otras relaciones que pueden adquirir más importancia, como las conexiones de los niños con sus tíos, tías o abuelos.