Los niños que están en familias de acogida tienen necesidades especiales de atención médica. Antes de estar en familias de acogida, la mayoría de estos niños vivían en familias afectadas por:
La experiencia de vivir fuera de sus hogares generalmente produce confusión, preocupación, miedo, tristeza y pérdida de control. Aunque es imposible predecir todas las preocupaciones que podrían tener estos niños sobre la salud, sabemos que tienen muchos más problemas de salud física, mental, dental y desarrollo que los niños que no están en familias de acogida.
Lo ideal es que los niños conserven a su proveedor de cuidado infantil familiar cuando ingresen a una familia de acogida. Sin embargo, puede que no sea posible. A veces, los niños entran al sistema de cuidado infantil por primera vez cuando ingresan a una familia de acogida. Además, es posible que los padres o familiares de acogida tengan que inscribir a los niños para el cuidado infantil inmediatamente después de ser asignados.
Los problemas comunes de la transición (cambio) de un niño a un sistema de cuidado infantil son entre otros:
- Una mayor dificultad en la transición a un sistema de cuidado infantil debido a que el niño tiene que adaptarse además a la colocación en una familia de acogida y a estar lejos de sus padres biológicos.
- Falta de conocimiento de parte de los profesionales de educación inicial y cuidado infantil acerca de cómo ayudar a un niño con antecedentes traumáticos.
- Dificultades para inscribir a un niño en un sistema de cuidado infantil debido a la falta de información médica, lo que a veces produce un cambio de colocación o el uso de proveedores de cuidado infantil sin licencia.
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Problemas de comportamiento que no permiten que el niño regrese al sistema de cuidado infantil.
- Los problemas de comportamiento que suelen provocar la suspensión o expulsión del sistema de cuidado infantil y se basan en traumas infantiles y son, entre otros:
- Tener un comportamiento inapropiado con el personal u otros niños
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Robar
- Daño a propiedad
- No cumplir las reglas
- No escuchar al proveedor de cuidado infantil
Consejos para padres o familiares de acogida
Estos son algunos de las medidas que los padres o familiares de acogida pueden tomar para ayudar al niño a tener una transición exitosa al programa de cuidado infantil:
- Visite el programa con el niño antes de que comience a asistir.
- Informe a los profesionales de educación temprana y cuidado infantil sobre la necesidad de apoyo adicional debido a que el niño se está habituando a su hogar y al cuidado infantil.
- Envíe un objeto de transición, como una manta o un muñeco de peluche, con el niño todos los días; incluso puede dejar que el niño elija qué traer ofreciéndole algunas opciones. Nota: para reducir el riesgo del
Síndrome de muerte súbita del lactante, los niños menores de 1 año no deben tener ropa de cama ni objetos blandos dentro de la cuna.
- Dígale al niño quién lo recogerá al final del día.
- Dígale al niño que volverá a casa al final del día.
Consejos para proveedores de educación temprana y cuidado infantil
Estos son algunos pasos que los profesionales de educación temprana y cuidado infantil pueden seguir para ayudar al niño a tener una transición exitosa al programa de cuidado infantil:
- Asegúrese de que se cuente con la autorización correspondiente cada vez que se recoja a un niño para una visita con los padres biológicos. Con frecuencia, la persona que recoge al niño cambia de una semana a la otra o los padres biológicos pueden venir a visitarlo de manera inesperada. El programa de cuidado infantil debe asegurarse de que el niño solamente reciba visitas o sea recogido con la debida autorización.
- Garantice la confidencialidad sobre el hecho de que un niño en particular está en una familia de acogida. Los profesionales de educación temprana y cuidado infantil no deben mencionar que un niño se encuentra en una familia de acogida delante de otros padres u otros niños.
- Deben ser conscientes de que los niños que están en familias de acogida con frecuencia son muy sensibles a las transiciones y la separación. Además, las horas antes o después de las visitas pueden ser muy estresantes para el niño.
Consejos para facilitar la transición:
- Procure que el cuidador sea el mismo todos los días.
- Permita que el niño tenga a mano fotografías de las personas importantes en su vida.
- Prepare al niño para las visitas con la familia (algunas se producen durante el día y cuando el niño es recogido o devuelto al programa de cuidado infantil). Colabore en la transición cuando el niño es recogido para una visita, especialmente si la persona es un desconocido para él (por ejemplo, un chofer).
- Después de una visita, permita que el niño pase tiempo con un adulto que conoce y es afectuoso para hacer la transición de volver al ámbito de cuidado infantil.
- Tenga en cuenta que algunos malos comportamientos pueden aumentar antes o después de una visita, si la visita se cancela o si los padres no vienen.
- Es necesario ser conscientes de que las rabietas (berrinches) u otros problemas de comportamiento también se deben manejar con sensibilidad.
- Puede ser muy perjudicial aislar a un niño (por ejemplo, ponerlo en "pausas obligadas") cuando ya de por sí se siente "abandonado".
- Es necesario ser conscientes sobre los problemas de salud mental comunes de los niños que están en familias de acogida (y cómo reaccionar frente a ellos), como:
- Busque la asistencia de un
profesional de la salud mental si los comportamientos del niño son problemáticos o si el niño tiene dificultades crónicas con las transiciones o las separaciones.
- Promueva sensibilidad en relación con proyectos tales como el Día de Madre y el Día del Padre (por ejemplo, preparar dos regalos, uno para la madre o el padre de acogida y otro para la madre o el padre biológico).