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Edades y Etapas

Razones comunes de rehospitalización

Los avances tecnológicos en la medicina perinatal y neonatal están creando una población creciente de bebés con necesidades especiales, tanto en hospitales como en casa. Los bebés van a casa más enfermos y más rápido que antes. A pesar del entrenamiento en cuidados especiales y un seguimiento médico cercano, estos bebés corren riesgo de ser hospitalizados nuevamente. Un bebé que nace con un peso menor de 3 libras y 5 onzas (1,500 gramos) tiene casi un 40% de oportunidad de ser hospitalizado nuevamente durante el primer año de vida.

Según la enfermedad subyacente, las estadísticas son similares para bebés con enfermedades crónicas o que dependen de la tecnología. Este índice cae a aproximadamente 10% luego del primer año.

Estas estadísticas no pretenden asustarle. Mas bien, son para recordarle que es probable que su bebé pueda aún tener necesidades especiales de salud luego de ser dado de alta y que llegar a casa, en realidad, es solo el inicio de un nuevo conjunto de desafíos para usted y su familia.

“Tommy fue hospitalizado nuevamente tres veces durante su primer año en casa. Cada vez fue desalentador y agotador para toda la familia. Pero ahora que ya tiene dos años, se enferma con menos frecuencia. Creo que ya superamos la etapa.”

Las enfermedades comunes de la infancia pueden amenazar potencialmente la vida de los bebés con muy bajo peso al nacer (Very Low Birthweight), de aquellos con DBP u otras enfermedades crónicas y de bebés que dependen de la tecnología. Vacunar a su bebé egresado de la Unidad de cuidados intensivos neonatales es un paso importante para prevenir muchas enfermedades potencialmente graves.

Las infecciones respiratorias son la causa más frecuente de reingresos al hospital entre egresados de la UCIN. Pueden dar como resultado la necesidad continua de oxígeno complementario, apoyo de respirador, tratamientos respiratorios o medicamentos para la enfermedad reactiva de las vías respiratorias (similar al asma). El resfriado común, que es una infección de las vías respiratorias altas, puede causar dificultades respiratorias importantes. Las infecciones del tracto respiratorio bajo, tales como la neumonía, pueden tener el mayor impacto en su bebé y posiblemente requieran un reingreso prolongado al hospital. Las infecciones respiratorias se presentan con mayor frecuencia en bebés que están expuestos al tabaquismo que en aquellos que no lo están.

Las dificultades en la toma de alimentos y las necesidades alimenticias que no se han llenado pueden llevar a ingresos hospitalarios repetitivos. Es probable que su bebé no esté llenando sus necesidades nutritivas si se está amamantando poco, quemando demasiadas calorías para respirar o experimentando reflujo gastroesofágico. Cuando fallan los métodos de tratamiento convencionales para incrementar la ingesta nutritiva, su bebé puede ser remitido a un profesional o terapeuta del habla especialmente capacitado en problemas orales motores si la toma oral de alimentos es el problema. Si el reflujo es el problema y es grave, su bebé puede reingresar para evaluaciones adicionales o para un procedimiento quirúrgico llamado fundoplicación. La nutrición óptima y aumento de peso son necesarios para ayudar a su bebé a contrarrestar las infecciones, disminuir el trabajo para respirar, disminuir las necesidades de oxígeno y alcanzar logros en el desarrollo.

Si su egresado de UCIN tiene en casa un monitor para la apnea, usted puede en determinado punto notar episodios más frecuentes o intensos de apnea y bradicardia. Informe a su pediatra acerca de esta tendencia de inmediato. En algunos casos, puede realizarse una prueba para comprobar el nivel de teofilina o cafeína en la sangre de su bebé en el consultorio de su médico. Si los episodios de apnea y bradicardia son graves o están acompañados de otros signos de enfermedad, su bebé puede necesitar reingresar al hospital para una vigilancia más cercana,  evaluación adicional o ajustes en el medicamento.

Los problemas del neurodesarrollo, discapacidades de la visión y audición y cirugías cosméticas pueden necesitar también reingresos al hospital, especialmente cuando su hijo es mayor. Un niño con PC puede necesitar cirugías ortopédicas para liberar los tendones tensos. Un niño con el ducto lagrimal bloqueado puede necesitar un procedimiento de cirugía menor para abrirlo. Si su bebé tiene cicatrices de procedimientos de UCIN (tubos en la caja torácica o colocación del catéter), usted querrá considerar la cirugía cosmética cuando sea mayor y los riesgos médicos hayan disminuido o hayan sido resueltos.

Su parte para prevenir la rehospitalización

Inevitablemente no podrá controlar el progreso de la recuperación médica de su bebé, pero puede tomar pasos para reducir los riesgos de una rehospitalización. Aquí hay algunas sugerencias.

Proporcionar atención apropiada

La prevención de una rehospitalización comienza de hecho antes del alta al aprender acerca de las necesidades de cuidado especial de su bebé. Pregunte y practique hasta que se sienta cómodo y capaz de proporcionar cuidados a su bebé. Hable si tiene preguntas o si siente que los están apresurando a que salga. Es normal sentirse de cierto modo aprensivo cuando su bebé llegue a casa, pero ayuda saber que está familiarizado con los cuidados de su bebé y entiende como monitorear los problemas potenciales.

Trabajar con su encargado del cuidado de salud

Seleccionar un proveedor de atención médica que comprenda las necesidades complejas de un egresado de UCIN también ayuda a prevenir rehospitalizaciones. Las visitas semanales al consultorio pueden ser necesarias durante el primer mes para monitorear el aumento de peso de su bebé y el progreso general y abordar sus preguntas e inquietudes. La identificación temprana de enfermedades y una buena comunicación con su proveedor de atención médica puede prevenir que una enfermedad menor se convierta en una hospitalización mayor.

Última actualización
11/21/2015
Fuente
Newborn Intensive Care: What Every Parent Needs to Know, 3rd Edition (Copyright © 2010 American Academy of Pediatrics)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
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