Si últimante ha estado pensado si ya será otra vez hora de llevar al bebé al médico, la respuesta es probablemente: sí. La American Academy of Pediatrics (AAP) recomienda que todos
los bebés sean examinados por un pediatra después del parto y de dos a cuatro días después del nacimiento; después, a los dos, cuatro, seis, nueve y doce meses de edad, aunque muchos pediatras ven a los bebés con más frecuencia.
Es importante cumplir con el itinerario de vacunas infantiles recomendado para cerciorarse de que los bebés tienen la protección que necesitan contra
las enfermedades que se pueden prevenir con las vacunas. Sin embargo, las inyecciones no son el único motivo para ver al pediatra. Los pediatras controlan el crecimiento, la salud, la nutrición, la seguridad y el desarrollo de los niños. ¡Olvide su timidez y traiga una lista con sus preguntas! Usted conoce mejor que nadie a su bebé, así que es importante que sienta que puede comunicar cualquier inquietud que tenga.